Puerta abierta para el crecimiento

La lluvia con la que amaneció la mañana no logró deslucir ni una pizca el inicio de la nueva campaña de le Escuela de Rugby Arroyo. El sol se abrió paso y los pequeños Ornitorrincos pudieron llevar al césped sus ganar de entrenar. A los jóvenes veteranos de la escuela se les unió un numeroso grupo de nuevos fichajes dispuestos a aprender y a tomar contacto con el deporte del balón oval. 

Más de medio centener de niños de todas las edades se dieron cita en el campo de La Vega de Arroyo, donde disfrutaron de una gymkana que puso a prueba sus habilidades como rugbiers. La actividad estuvo coordinada por monitores y jugadores del equipo senior de Arroyo, que este año parece cerca de alcanzar el objetivo de contar con equipos en todas las categorías.  

Por la tarde, fueron los senior los que pisaron el encharcado césped de La Vega para disputar un cuadrangular que tuvo como invitados al VRAC Quesos Entrepinares, Zamora y Pontevedra. Tres rivales a los que los de Arroyo lograron superar en una jornada en la que reinó el animado ambiente que suele acompañar al rugby.