27-38: Test fallido

El Quesos, a diferencia de los guipuzcoanos, volvió a hacer muchas pruebas y a dar minutos a un número importante de jugadores. El equipo va cogiendo la forma física y también pone de manifiesto que perfectamente esta temporada puede exponer ese rugby fluido que gusta a los aficionados queseros. Aficionados que abarrotaron la grada principal de Pepe Rojo en una tarde de mucho calor. La gran mayoría de ellos aprovecharon para renovar el carnet, alcanzando un número importante de altas y renovaciones en los primeros días de la campaña de socios.

Pese a que es complicado y quizás injusto hacer valoraciones individuales en plena pretemporada, cabe destacar el encuentro realizado por jóvenes como Alejandro Alonso, Asís o alguno más contrastado, caso de Santi Ovejero o Daniel Sthor, que se fajó con una intensidad espectacular de los jugadores ordiziarras durante todo el tiempo que estuvo sobre el terreno de juego. La realidad es que en facetas importantes como la touch o la melé, al equipo todavía le queda mucho trabajo por delante.

La primera parte resultó más igualada, con alternancia de puntos y Ordizia tomando ventaja, en gran parte, gracias a su acierto con el pie. El VRAC dejó escapar muchos puntos al errar las transformaciones. El Quesos llegó a estar por delante en el marcador cuando el partido llevaba 30 minutos discurridos gracias a un ensayo de Álvaro Abril, que está llamado a ser un jugador muy importante esta temporada. Antes del descanso Álvarez de Eulate revirtió el resultado. 

El segundo tiempo tuvo color visitante pese al empeño y las ganas que puso el VRAC hasta el pitido final, con un postrero ensayo de Pedro de la Lastra que maquilló un resultado mejorable pero intrascendente.