Y POR FIN SE DISFRUTO EN PISUERGA

Charlie Carballo | Aficionado fiel
8 de Marzo de 2011

Por unas o por otras causas, la afición vallisoletana no habíamos tenido la oportunidad de disfrutar completamente con el juego del equipo en la competición europea. Pero el sábado pasado, el coraje y la garra de nuestros jugadores nos convencieron a todos. Nunca me ha gustado destacar a nadie en concreto, porque creo que si tengo que decir que sobresalió algo, diría que fue el jugar como un equipo. 


Qué duda cabe que Svensson “se salió”, pero por encima de su gran actuación, lo que más me gustaría destacar es que con cada parada daba gusto ver como él mismo era capaz de disfrutar como si fuese un crio de 15 años.


También parece que la grada despertó, porque a excepción de un reducido grupo de personas que siempre animan (a pesar de lo que se ha querido dar a entender durante los últimos días en un determinado medio radiofónico), es muy difícil ver al público de Pisuerga volcarse con el equipo, y en los octavos de final de la Champions Leage hay que conseguir, tanto que el pabellón esté abarrotado, como que los gritos de ánimo de la gente conviertan ese recinto en una auténtica “olla a presión”.     


Quiero destacar que el Cuatro Rayas BM Valladolid de nuevo está entre los 16 clubes más importantes de Europa, y creo que en absoluto es algo que se valore en su justa medida en esta ciudad. Es como si fuese lo más normal del mundo. Solamente espero que cuando esto no sea así, aquellos que no han querido apoyar al club no se lleven las manos a la cabeza.  


Acabo de saber el rival en octavos; el Hamburgo alemán. Sinceramente, quería un club que no fuese español, porque si nos hubiese tocado el Barcelona Borges no daría la sensación de ser una competición internacional. Aunque la verdad es que a estas alturas, ningún equipo resulta fácil. Solo una cosa, ellos no estarán demasiado contentos de cruzarse con nosotros. Estoy convencido de que si los jugadores del Cuatro Rayas saben sufrir como el sábado pasado pueden pasar de ronda.


Hay que llenar el pabellón de camisetas amarillas. 


A por ellos! ! !