VA POR TI COLEGIO

No soy yo de lagrima fácil, ni de emocionarme mucho (al estilo Bustamente), pero el domingo pasado al terminar la final de Copa del Rey he de reconocer que lloré. Lo siento Asua pero no cumplí, tu máxima de que un hombre de rugby nunca llora..

Nunca nadie me ha puesto presión en que tengo que ganar éste o aquel partido o un título u otro, pero esta vez la presión me la puse yo. Ansiaba ganar esta Copa para poder dedicársela a mucha gente que se lo merecía. Primero y sobre todas las cosas al colegio El Salvador, el que me ha dado dos de las cosas más importantes de mi vida: el rugby y mis amigos. Esta Copa del Rey es mi regalo en estos 50 años de su club de rugby. Gracias a la familia Enciso por todo.

Luego se iba mi presidente. Ese que me dio la oportunidad para entrenar a mi club cuando tenia 27 años y que se acordó de mi este año cuando las cosas no iban del todo bien. Y que menos que despedirse en lo más alto. Gracias Tito.

Otra parte de esta Copa es para mi familia y mi novia. Cuando en noviembre volví a entrenar ellos ya sabían que mi tiempo para el rugby es sagrado y los primeros “perjudicados” iba a ser ellos. Su apoyo y comprensión para mí ha sido fundamental. Gracias.

Y la ultima parte es para el equipo y la afición. Los jugadores se han partido el alma desde el primer día hasta la final, han currado sin rechistar, han creido en la idea de trabajo y de juego que teníamos el cuerpo técnico y se merecían entrar en la historia del club de rugby El Salvador. Sus nombres ya siempre estarán escritos en letras de oro en la historia del `chami´.

Y nuestra afición. Sólo ganar esta Copa del Rey puede compensar todo el ánimo que nos da. Llegar a Villajoyosa y verles en el campo fue una motivación para el equipo. Gracias y esta Copa es para vosotros.

Por todos ellos fue la emoción cuando Paloma pito el final del partido. El trabajo estaba hecho y en parte podía devolver algo a todos de los que tanto recibo…