Gustavo Aranzana
Gustavo Aranzana

SUPERVIVENCIA

Gustavo Aranzana | Entrenador de baloncesto
23 de Octubre de 2012

No estoy hablando de un programa de televisión de esos que llaman reality,  mi referencia es hacía nuestro Club de Baloncesto Blancos de Rueda Valladolid.

Después de finalizar la temporada pasada en puestos de descenso, se acometió volver a competir en ACB por la falta de equipos que pudieran aumir el ascenso y la venta de la plaza del Lucemtun Alicante. Esta oportunidad se consumó gracias a la intervención del Ayuntamiento y de la Directiva, pagando en el último momento el canon. Con muchos apuros y a última hora nuestra inscripción fue un hecho. Una vez más el Club sobrevivía a otra situación límite.

Comenzó una campaña de socios destinada a llenar el Polideportivo Pisuerga en cada partido, con unos precios de abonos súper accesibles y que invitan a la implicación y el compromiso con nuestro Club. Gracias a esta complicidad estoy seguro que nuestro equipo seguirá superando los enormes problemas económicos que le lastran desde hace tiempo. Sobrevivir en lo económico resulta actualmente más complejo para la entidad que la supervivencia deportiva.

Con cambios en la parte directiva y presidencial se empezaba una Liga marcada por la enorme dificultad en conseguir recursos y una enorme desigualdad entre los equipos participantes. Toda la suerte y acierto para los directivos actuales ante un año crucial, y agradecimiento sincero a todos, los actuales y los que les precedieron, por su dedicación y honestidad.

Cuando este verano se acometía el capítulo de fichajes,  tras una pretemporada mala y decepcionante (mantengo mi criterio que las pretemporadas no son significatívas a la hora de sacar conclusiones), manteníamos el pesimismo ante la escasez de recursos económicos y de tiempo. Había la sensación de que, muy a nuestro pesar, nos costaría mucho conseguir victorias y estarías abocados al descenso casi desde el principio, opinión muy compartida y generalizada en los círculos de opinión y que actualmente han tenido que modificar su valoración y analizar de modo muy distinto, tras el comportamiento y logros de un grupo humano magnífico.

Trabajar y sobrevivir a estos parámetros tiene mucho mérito. Blancos de Rueda no solo ha formado un buen grupo de jugadores sino que ha sabido unirse y, junto con el mérito y conocimiento del cuadro técnico, formar un grupo con carácter con espíritu ganador y que se sobrepone a cualquier contratiempo.

Nadie puede disimular ni esconder ahora las dudas que se generaron al principio sobre la plantilla y, aunque todavía queda mucho y será muy duro el camino, hasta ahora lo conseguido tiene que servir de aliciente y seguridad para sobrevivir en esta Liga y conseguir el objetivo de la salvación.
Dos victorias en canchas muy complicadas (una de ellas casi imposible) tienen mucho mérito, pero lo más gratificante para todos los que nos gusta este deporte y nos sentimos muy unidos a este nuestro club es comprobar que todos los que forman parte del equipo lucharán y se dejarán el alma para sobrevivir un año más y dejar en mal lugar a los que auguraron prematuramente la desaparición o la falta de calidad y compromiso de unos profesionales para competir con los mejores.

Siempre asumiendo riesgos, analizando y acometiendo situaciones muy delicadas y siempre superando adversidades, nuestro Club de Baloncesto camina por una línea muy fina de continuidad o desaparición. No tengo dudas que deportivamente nos van a dar alegrías y buen juego, así que en lo social ayudemos a conseguir estabilidad.

Luchar, luchar y luchar para sobrevivir es desde hace años el ADN de nuestro Baloncesto en Valladolid.