QUERIDOS REYES MAGOS
Este año he sido muy bueno. He ido a todos los partidos de liga de mi Real Valladolid, tanto los de 1ª como los de 2ª división, e incluso a los de Copa del Rey hasta que nos han eliminado, y además he aguantado en mi asiento hasta que el árbitro ha pitado el final.
A principios de la temporada pasada yo también me ilusioné con la que nos dijeron que era la mejor plantilla de los últimos años; me creí que Manucho iba a meter 40 goles (bueno, esto sólo me lo creí a medias), me reí mucho con los monólogos de Leo Harlem; creí que teníamos un medio del campo espectacular con un tal Pelé, uno que tenía un nombre un poco raro como Mediojuanín, o algo así; me creí que los 13 fichajes que se hicieron eran mejores que los que echaron por la puerta de atrás como Víctor, Óscar Sánchez, Iñaki Bea y otros que también se fueron
Creí también que Onésimo iba a poder arreglar lo que el secretario técnico (es que como soy bueno, prefiero no poner su nombre) había estropeado; aunque también tengo que decir que pensaba que Mendilíbar podía sacar adelante el trabajo que no le estaban dejando hacer; luego creí también que Clemente, que tiene conexión directa con San Mamés, y ese sabe de fútbol un rato, iba a poder hacer el milagro me creí tantas cosas que luego me llevé una gran desilusión.
En verano, se me pasó todo y volví a creer que el presidente iba a hacer una plantilla competitiva, así que renové mi abono de los primeritos, y además me regalaron una botella de vino. Fijaros, queridos Reyes Magos si me lo creí, que también hice abonada a mi hija con apenas 9 meses. Y empezó esta temporada. Muy bien durante tres partidos ¡Cómo nos engañaron! Y otra vez me estoy creyendo todo lo que me dicen, pero es que con partidos como el del Numancia, o como el de hoy contra el Tenerife que me he aburrido mucho, mucho ya no he salido cabreado como otras veces, sino diciendo esto es lo que hay no dan para más y ya me cuesta mucho seguir creyendo en mi equipo.
Por eso, queridos Melchor, Gaspar y Baltasar, os pido ver ganar al Pucela alguna vez más en nuestro estadio esta temporada; no descender a 2ª B que quizá tenga que ser nuestro objetivo a partir de ahora; os pido también ver cómo nuestros jugadores lo ponen todo en el campo y luchan, aunque no den para más; os pido también un portero que pare, una defensa que defienda, un centro del campo que corte balones y los juegue con sentido, delanteros que metan goles; y os pido sobretodo, sobretodo seguir teniendo la ilusión de subir al estadio cada vez que juguemos en Zorrilla para animar al equipo, gritar y cantar junto a todos mis compañeros Vamos mi Pucela, vamos campeón y no os pido nada más, aunque sé que ya estoy pidiendo mucho.
Como sé que me lo vais a traer, me iré prontito a la cama, os dejaré tres copitas de anís junto a los zapatos y unas pastas para vosotros, y un poco de agua para los camellos. Hasta el año que viene, que espero que mi carta no sea tan difícil de cumplir.
Muchas gracias por traerme este bonito regalo
Firmado: Un aficionado del Pucela
David
