MUCHO POTENCIAL
Este lunes se presentó en el Ayuntamiento la segunda edición de una carrera que descubrimos por vez primera el año pasado. Se trata de una carrera peculiar y diferente a cualquier otra que se celebra en Valladolid.
Yo tengo que reconocer que hasta el año pasado no "conocía" la existencia de la ruta Ríos de Luz, así que decidir correr para ver qué sensaciones me daba, aunque apenas había entrenado.
El circuito tiene dos características esenciales a mi modo de ver, es precioso y rapídisimo. El hecho de disputarse un sábado por la tarde en el mes de noviembre hace que todo el recorrido se haga sin luz natural; y eso es lo bonito principalmente de la iniciativa, recorrer -o más bien correr en nuestro caso-, por los lugares y monumentos más emblemáticos de Valladolid iluminados.
Si a esto añadimos que tenemos el lujo de correr sin demasiadas curvas por el centro de la ciudad y que la única pequeña dificultad sea la subida por detrás de San Benito, convierten la prueba en una carrera muy rápida y asequible, pues apenas se pasan los kilómetros kilómetros.
Por tanto el 17 de noviembre es una buena ocasión para correr rápido y "visitar" nuestra ciudad todo en uno.