MIS DISCULPAS
esta semana me ha ocurrido algo que, cuando me surgió la oportunidad de expresar mi opinión en Valladoliddeporte.es, me prometí a mí mismo que no me debía pasar, y es molestar a ningún lector. Ha ocurrido y por ello reconociendo mi error quiero pedir disculpas.
En ocasiones menciono algún nombre de los abonados que nos sentamos alrededor porque creo que la afición del Real Valladolid, dentro de que somos un conjunto, está formada por todos y cada uno de manera individual, con nuestro nombre y nuestro apellido. Y por eso somos distintos. Pero si nos va a sentar mal, desde luego que no lo volveré a hacer (ya ha habido personas bastante más importantes que yo que han dicho estas palabras y es un ejercicio bonito de catarsis interna que te hace sentir mejor).
En mi ánimo no ha estado jamás la intención de ofender a nadie, sino más bien todo lo contrario, ya que soy de los que va al estadio a pasárselo bien, intentar transmitir el buen rollo que se debería vivir en todos los deportes. En fútbol quizá deberíamos aprender todos mucho del ambiente tan sanote que se viven en otros campos de juego como los de rugby o balonmano, sin ir más lejos. A partir de este momento, como a veces pone en las películas en letra pequeña, cualquier parecido del nombre que ponga con la realidad será mera coincidencia.
Y a ti, que bien sabes quién eres (lógicamente ya no voy a decir tu nombre pues podrías de nuevo sentirte ofendido y he dicho que no lo volveré a hacer), reiterarte mis disculpas, y que si todos tenemos un mal día, bien saliéndonos de tono en el estadio, bien escribiendo unas líneas en un medio de comunicación pues nos tomamos una cañita juntos, lo hablamos en el descanso y pelillos a la mar.
Gracias a todos los demás seguidores de valladoliddeporte.es por aguantarme cada vez que el Pucela juega en casa o cuando tengo la suerte de poder desplazarme a verlo en otros estadios, y que esto no estropee lo que debe ser nuestro objetivo común que es apoyar al Real Valladolid.
¡Aúpa Pucela, aúpa Real Valladolid!
