MI PROPIO VINTAGE PUCELA

Aún sigo emocionado desde el jueves que se emitió el programa de Teledeporte "Conexión Vintage" dedicado a nuestro Pucela, y es que según lo veía, iba recordando muchas de las jugadas, muchos de los goles, muchos de los jugadores que nos han ido mostrando. Y es que el Pucela solo se puede definir con una palabra “SENTIMIENTO”. Sentimiento porque ser del Pucela no es fácil, ser de un equipo que no puede contratar superestrellas, ser de un equipo que cada vez que tiene un jugador que destaca un poco lo vende o se lo quitan, o que quizá ese jugador venga a Valladolid porque no cuaja en otros lados por razones extradeportivas, pues. . .


Pero a pesar de todo seguimos siendo del Real Valladolid, estamos siempre un puñado de fieles junto al equipo, esté en Primera o en Segunda (los más viejos del lugar dirán que incluso en Tercera, pero aún no llego a tanto y espero no verlo jamás). Desde hace más de veinte años luchamos básicamente por no pasar apuros en Primera División, o cuando estamos en Segunda por subir ese mismo año. Leía con una sonrisa el otro día un comentario que decía que nosotros tenemos títulos que nunca tendrán el Madrid o el Barcelona y son títulos de la División de Plata ¿o no?


Nuestra historia, como decía, nos lleva a momentos inolvidables, a partidos épicos pero seguro que la mayoría estaréis conmigo que, sobre todo, recordamos partidos extraños como los que hay una niebla espesa, de esas que solo tenemos a orillas del Pisuerga y no se ve una portería desde la otra; partidos de esos en los que se tiene que cambiar el color del balón porque si no con la nieve no se distingue, o pintar las líneas en vez de con cal con pimentón. Y son estos momentos los que hacen de nuestro Pucela un equipo, un club diferente, porque los momentos míticos y colectivos todos los conocemos: el título de la Copa de la Liga, la inauguración del Nuevo Estadio José Zorrilla (creo que jamás dejará de ser “nuevo”), el gol más rápido de la liga, etc.


Pero esos momentos diferentes como cuando Harold Lozano silbaba y se paraba el juego y metíamos gol; cuando el Betis de Clemente impugnó el partido y perdimos en los despachos 0-3; o si hablamos de despachos, cuando allá por los años 95/96 nos salvamos porque Celta y Sevilla no cumplían con su obligaciones y la presión mediática, con José María García a la cabeza, llevó a salvar finalmente a todos: Celta y Sevilla por papeles, y Albacete y Valladolid por lo deportivo; si de Supergarcía hablamos, quién no recuerda el despido de Cantatore por la radio por Marcos Fernández hijo; despido por radio del que quizá, quizá no, seguro ha sido el mejor entrenador de nuestra historia que ese año 95/96 sustituyó a Rafa Benítez de entrenador cuando íbamos a ocho puntos de la salvación, cuando la victoria valía dos puntos y nos salvó mandando al Salamanca a Segunda, con una plantilla en la que, por ejemplo, estaban unos pipiolos Fernando Sánchez Cipitria, Santamaría, Víctor o Marcos, y luego en Navidad llegó Juan Manuel Peña desde Bolivia. . . y sí, nos salvó.


Y al año siguiente nos llevó a la UEFA (seguro que alguno de los que leéis esto no sabéis ni lo que es la extinta Copa de la UEFA) y lo celebramos por las calles del centro de la ciudad, y me acuerdo de alguno de estos jugadores montados en las motos de la Policía Municipal, y me acuerdo del propio Fernando teniendo que jugar de delantero centro porque se nos habían lesionado los que teníamos. . . vaya, ya desde antaño tenemos problemas con las recuperaciones de los jugadores. Y aun así seguimos sin darle el homenaje que se merece Don Vicente, en fin.


Pero si hablamos de escribir nuestra historia, esta se escribe sobre todo con ascensos, con celebraciones en la Plaza Zorrilla como la que vamos a tener este año a pesar de lo irregulares que estamos siendo, porque no puede ser que una semana nos metan cuatro y los metamos nosotros a nuestros vecinos de Soria la semana siguiente. Porque digo yo, ¿no son los mismos jugadores una semana y la siguiente? Claro que debe de ser cosa de que por regla general los partidos contra el Numancia suelen ser partidos locos y de muchos goles. Menos mal que hoy el único zumbado ha sido del equipo contrario y nos lo ha puesto en bandeja de plata, bueno, como hace años lo fue Caminero (para mí el mejor jugador de toda la historia del Real Valladolid durante su época en el equipo) que un año de su segunda etapa en el equipo le expulsaron en el partido inaugural precisamente contra el Numancia, perdimos y su excusa siendo ya talludito fue que habíamos pagado los nervios del debut. Pues sí.

Y seguiremos con este vintage con permiso de los creadores originales, porque todos tenemos nuestras historias que contar, nuestras anécdotas, nuestros jugadores favoritos, personajes infames, que también los ha habido, y habrá que hablar de ellos, pero sobre todo, lo que tenemos es un SENTIMIENTO DEL PUCELA, ese que no nos permite a “los diez mil” dejar de seguir y apoyar a nuestra manera a nuestro equipo y que nos  gusta estar pendientes de la actualidad del equipo, y nos tragamos todas las tertulias de radio y televisión local, y que gracias a los podcast por las noches ya no tenemos que aguantar las emisoras nacionales y podemos tener felices sueños blanquivioletas, y que dentro de unos años recordaremos que este año volvimos a subir a Primera División, porque Pucela es de Primera.