EL REY DE LOS DEPORTES

Ha sido un fin de semana donde, con permiso del fútbol y del balonmano, el atletismo
ha sido en Valladolid el rey de los deportes. El sábado por la tarde y con el magnifico escenario de la Acera de Recoletos nos deleitábamos todos los amantes de este deporte con la milla de Isaac Viciosa.

Muy bien organizada por Isaac y con una muy buena presencia de público, esperemos
que esta Milla logre tener el empuje que ya hace muchos años tenían las millas en
Valladolid. Además el objetivo debe ser enganchar a los más jovenes a este apasionante deporte.

A los más pequeños, y a los que dejan atras la niñez y empiezan la adolescencia, les
es muy reconfortante ver no sólo el aliento de los familiares (que siempre lo tienen) sino correr en el centro de la ciudad y animados por mucha gente.

En cuanto a la carrera de los mayores, la gente debe tener en cuenta que es todo un lujo poder ver a Mayte en una competición y no por la televisión. Además, en vivo se aprecia con mayor nitidez el correr fácil de alguien que parece que apenas le cuesta. En cuanto a la carrera masculina, también es todo un privilegio poder contar con el internacional burgalés Diego Ruíz, que se quedó a las puertas de ir al Europeo de Barcelona -el 1.500 está muy caro en España-, y a Alberto Galindo, un clásico de las millas y que ya estuvo hace años con el grupo de entrenamiento de Viciosa. El tercero en discordia fue el atleta del Vaillant Racing Edu Fuentes, demostrando la clase y categoría que tiene.

Yo eché de menos al vallisoletano Alvaro Rodríguez. Desconozco los motivos por los que no corrió, pero soy de la opinión de que un atleta de la tierra debe competir siempre en su casa y ante su gente.

En cuanto a la mañana del domingo, unos cuantos cientos de personas madrugamos un
poquito y nos dispusimos a correr por las calles de Valladolid sin coches, atascos y
demás incovenientes del día a día. La mañana fue perfecta, con una temperatura que
ni a pedir de boca para hacer 21 kilómetros sobre asfalto. Es más, alguno durante la carrera gritaba lo bueno que hacía para correr.

Por parte de la organización anunciaron que corrian unas 1.500 personas. A meta llegaron 1.230. Yo ya ni sé las veces que he corrido esta media, y eso que a mi personalmente me viene fatal, porque en verano apenas entreno, pero me hace una ilusión tremenda salir a correr por las calles de mi ciudad. Creo que este pensamiento lo compartimos muchos de los que participamos en esta prueba.

En cuanto a la organización, por una vez felicitar por el circuito. Se ha cambiado muchas veces el recorrido, pero creo que el de este año ha sido el mejor de todos. Por fin se pueden aprovechar las calles largas de Valladolid para rodar y no callejar tanto como otros años. Este comentario estaba en boca de todos en la linea de meta. Además no se da la vuelta al Campo Grande que se hizo eterna a todo el mundo el año pasado.

En cuanto a los contras, hay gente que se queja de lo poco que dan (en referencia al
polo de El Corte Ingles) para lo que cobran. Yo no entro a valorar esta cuestión, tan de moda últimamente. Hay que concienzarse que ya hay que pagar por correr el la
gran mayoría de carrreras que hay por España, y no sólo en Valladolid.

Otra pega es el nivel técnico de la prueba. Los tres africanos que corren y el poco nivel
de los atletas españoles (sólo un español bajó de 1:10). Yo no sé por dónde quiere
"tirar" la organización. Es muy bonito y colorido traer gente de fuera a la que hay
que pagar normalmente un fijo y la estancia, pero luego lo demás queda muy deslucido.

Yo soy de la opinión de repartirlo un poco más y tratar de hacerla más generalista, tipo Behobia-San Sebastian -allí no hay premios económicos-, y llegan a correr 14.000
personas. Esperemos que en la próxima edición aumente el número de participantes y que, por favor, no nos toquen el circuito.