DIGA TREINTA Y CINCO

No veíamos fútbol en Zorrilla desde hace dos partidos,  y tanto tiempo se hace largo, y si encima tampoco puedes ir a este partido, ya ni te cuento. . . por motivos que no vienen al caso no he podido subir al campo a animar a nuestro equipo como cada vez que jugamos en casa (la verdad es que me gustaría decir que como hacemos cada domingo, pero como sabéis esta frase sería mentira, en fin). El caso es que le dejé los carnés (el de mi hija y el mío) a mi amigo Rubén para que llevara a su hija al estadio, que no había ido nunca.

Según me decía le hacía mucha ilusión ya que siempre ve a los jugadores por la tele.  “¿Y vamos a ver a Cristiano Ronaldo?” le preguntaba. Rubén no le decía nada para no quitarle la ilusión, pero es que mucho mejor que eso, iba a ir a ver a Alberto Bueno, Jesús Rueda, Álvaro Rubio y compañía. Teniendo a esta pedazo de plantilla ¿quién quiere a Ronaldo en su equipo? Bueno, tampoco me pasaré no sea que hagamos como en la cuña de hace unos años de Leo Harlem que no quería a Messi en nuestro equipo y mira lo que pasó.

La niña, que tiene seis años, iba "nerviosita" al campo. Además de preguntar por Cristiano Ronaldo también cosas típicas de la ingenuidad típica de su edad “¿Y es muy grande el campo? ¿Nos podemos hacer fotos con los jugadores? ¿Habrá mucha gente? . . .” Y cientos y cientos de preguntas que te ponen la cabeza como un bombo, pero como es tu hija, la respondes todas esas y más.

Después del partido (que no me perdí ni un segundo con el auricular en la oreja) llamé a Rubén para ver qué tal se lo había pasado, y me dijo que si no hubiera sido por la lluvia del final se lo habrían pasado genial. Que la niña estaba encantada, así que a ver si hemos ganado una adepta más para la causa blanquivioleta. Que así sea.

En cuanto al partido y al equipo. Otro puntito más y cada vez más cerca de los 42, que este año con un poco de suerte con 40 vale. Nosotros tenemos 35, y si yo fuera médico esta semana en vez de pedir a los pacientes que dijeran 33 les haría repetir 35 una y otra vez.

Si hace tres semanas salí enfadado del campo con nosotros mismos, con la afición, esta semana según me ha dicho Rubén nos hemos portado como solo nosotros sabemos. No nos hemos descompuesto con el gol de De Michelis y el apoyo que necesitaba el equipo lo ha tenido. Nuestros gritos y cánticos de habituales que han hecho disfrutar como nunca a esa niña de seis años. Y así, sí. Todos juntos, todos a una vamos a conseguir el objetivo.

Próxima estación: San Sebastián, que no será fácil, pero si alguien puede esos somos nosotros, y luego recibiremos a nuestro amigo Mendilíbar el domingo de resurrección por la mañana (otra vez tocando las narices con los horarios: Semana Santa y en Valladolid. . .) pero aunque Mendi, te queremos mucho, lo siento, pero suerte para la próxima.

Así que vamos una semana más, que tenemos 35 a falta de once jornadas y aunque lo tenemos a tiro aún no está hecho. ¡Vamos Pucela! O como diría Antonio Flores: "¡Arriba esos corazones!".