DÉJÀ VU

Ximo Tamarit Aleixandre | Milongas de Primera
31 de Agosto de 2010

Cuento número 8 (2T). Están todos equivocados. Todos excepto yo. El poder que mueve el fútbol español les ha intentado engañar. Conmigo no han podido. España cree que ha empezado una nueva Liga. ¡No! ¡Es mentira!


Yo, esto, ya me sabía cómo empezaba y creo saber cómo acabará. (Florentino me mataría). Será porque, últimamente, duermo poco. Entre pañales y biberones, dicen, ha vuelto el fútbol. A mí me parece que son los mismos perros con distintos collares. O los mismos collares con distintos perros. O lo que sea, me da igual, a veces no se ni qué digo. ¿Han visto un Barcelona diferente a las dos anteriores temporadas? ¿Un Real Madrid distinto?


¿Por qué sólo me cuestiono sobre estos dos equipos? Porque, sinceramente, no me pone ver al resto. Porque el campeonato son ellos y nada más. Porque los partidos de este pasado fin de semana ya me suenan, ya los he visto, ya los he vivido… ya me aburren. Uno golea sin esfuerzo, el otro quiere pero no puede pero aspira a poder. Y da igual si está Pellegrini o Mourinho; Ibrahimovic o Villa; Kaká o Canales; Pototo o el de la moto.


Para acabar con esta soflama sin sentido, un pequeño recordatorio para el primer líder del campeonato, el Atlético de Madrid. Ni ellos se lo deben creer, ni yo me lo acabo de creer. Así que quizá me emborrache a la luna de Valencia. El Dios Neptuno y yo, su acólito hereje.


Hoy, en pleno “déjà vu” futbolístico, el calendario me da un respiro. Por suerte, este fútbol doméstico que tanto me aburre se detiene unos días. Ojalá todos los domingos jugase la Selección, ¡ESPAÑA! Y ojalá la Liga fuese una anécdota una vez al mes. Es lo que tiene poseer un desarrollado “morrito fino”. Me encanta el jamón de calidad, el queso curado y el vino reserva. La mortadela, la Coca-Cola y las patatas bravas, no.


Milonga: f. coloq. Engaño, cuento.