Pastor da órdenes desde la banda de Pisuerga. Foto: Jonathan González
| Cuatro Rayas Valladolid
Organización máxima para una sesión doble
27 de Octubre de 2011
Sin kirbs pero con casacas amarillas. Las circunstancias están llevando al Cuatro Rayas a convertirse en un club nómada. Cuando no son las exigencias de la normativa europea son las de la televisión. El caso es que el equipo de Pastor se ha visto inmerso en un baile de pistas que el domingo vivirá un nuevo capítulo con motivo de la celebración del derbi regional frente al Ademar de León.
El partido será retransmitido por Teledeporte, y los requisitos técnicos precisados por la cadena estatal exigen un recinto con unas infraestructuras con las que no cuenta Huerta del Rey. El interés general del enfrentamiento entre vallisoletanos y leones obligará una vez más a los hombres de Pastor a alejarse del calor de su hogar para jugar en una pista mucho más fría, por el tamaño de la grada, que no mostrará esa imagen de olla a presión de la que puede presumir Huerta del Rey.
El inconveniente no se encontraría en el hecho de cambiar de domicilio de manera accidental. El problema estaría en que el mismo domingo a las 12.30 horas, el inquilino de Pisuerga, el Blancos de Rueda, cumple con sus obligaciones ligueras ante el Lagun Aro. Compartir polideportivo con el Cuatro Rayas no altera los planes del conjunto morado, que entrenará en la pista central de Pisuerga con normalidad, dejando todo preparado para el encuentro del domingo el viernes por la tarde. El problema llega a la hora de recoger. El partido ante el guipuzcoanos terminará pasadas las 14.30 horas. A partir del final del partido, los operarios de la televisión (el partido será retransmitido por la 8 de Castilla y León) y los trabajadores del club tienen por delante dos horas para devolver al polideportivo a su estado original. El balonmano precisa más de cuatro para preparar el suyo
Cuatro Rayas y Blancos de Rueda deberán solaparse para que todo salga a pedir de boca el domingo. Para lograr este objetivo es necesario un buen entendimiento entre las partes afectadas, un hecho que se da. A partir de este punto el equipo de trabajo del Balonmano Valladolid precisa de suerte y máxima organización. Suerte para que vascos y castellanos no acaben en tablas el último cuarto, llevando el partido a una prórroga que complicaría las labores de preparación del partido de por la tarde.
El reloj empieza la cuenta atrás desde las tres de la tarde. Hora en la que comenzaría el desmontaje del baloncesto y el montaje del balonmano. La colocación de la publicidad, la reestructuración de la pista o la instalación de las infraestructuras televisivas son sólo algunos de los deberes que tienen que estar completados cuando leoneses y vallisoletanos salten a la pista a calentar.
Otra muestra de la vida errante a la que se está acostumbrando el bloque dirigido por Pastor, se podrá vivir el mismo domingo por la mañana. Lejos de aclimatarse a la pista en la que se compite por la tarde, el entrenamiento previo al partido se celebrará en el Polideportivo Pilar Fernández Valderrama. Mientras el Blancos de Rueda juega ante su público en Pisuerga, en Huerta de Rey se estará celebrando el Campeonato Provincial de conjuntos de gimnasia rítmica, lo que pone una tercera etapa en el interminable peregrinaje del Cuatro Rayas.