59-73: El Barça gana en Valladolid con el piloto automático puesto
Llegó a Valladolid con el piloto automático después de forzar la máquina en Euroliga ante el Maroussi -donde debía atar su pase a cuartos-, y con el piloto automático se fue de Pisuerga después de sumar una nueva victoria, vigésimosegunda en 24 jornadas, que consolida su liderazgo y hegemonía en la Liga ACB. El Barça se impuso al Blancos de Rueda con lo justo, sin necesidad de utilizar esa sexta marcha que tanta admiración ha despertado esta temporada. No necesitó la dirección de Ricky Rubio (11 minutos en cancha), tampoco los puntos de Navarro (1/10 en el tiro), ni siquiera el liderazo adquirido por Fran Vázquez en la pintura en las últimas semanas. Este año no sufre dependencias. Esta vez fueron Lorbek (17 puntos) y, sobre todo, Morris (28 de valoración) los que decantaron la balanza. Pero perfectamente podían haber sido Lackovic, Grimau, Basile, Trías o el mismo Barton, que en Pisuerga sumó su primer minuto en Liga este año.
Son tantos los recursos que tiene que no resulta nada fácil derrumbar a este monstruo. Porfi Fisac lo intentó todo con los mimbres de que dispone, pero todas sus propuestas no hicieron sino atrasar la hora de su derrota. Para tumbar a este gigante en que se ha convertido el Barcelona de Xavi Pascual son necesarios 40 minutos plenos de actividad e intensidad a ambos lados de la pista, y el Blancos de Rueda sólo pudo ofrecer trece, lastrado por su más que discreta rotación. Los quince puntos que le dio el banquillo no sirvieron más que para acentuar la diferencia abismal que le separa de la rotación azulgrana. La respuesta ofensiva de los vallisoletanos fue su principal talón de aquiles, encogido en ocasiones, sobre todo en una primera parte insulsa, e impotente en la mayoría de sus posesiones debido al alto grado de exigencia al que obliga este líder a todos sus rivales -no deja pasar a nadie de los 63 puntos-.
El escenario no era nada propicio pero el equipo de Fisac lo intentó todo, ofreciendo alternativas de todo tipo. Algunas eficaces, como su defensa zonal en el tercer cuarto. Otras no tantas, como el triángulo y dos -sobre los aleros- con el que salió al partido. Pero todas ellas destinadas a sacar de sitio al líder. Chinitas en un zapato de grandes dimensiones que hasta la fecha tiene respuestas para todo.... y un poco más allá. Porque las zonas acostumbran a destrozarlas especialistas del calado de Navarro, Basile o Lackovic y el encargado en Pisuerga fue Morris. Un pívot capaz de sellar su canasta o culminar un alley-hoop con la misma facilidad con la que cierra un partido desde el perímetro (5/7 triples hoy).
Hoy le tocó a él. Y al Blancos de Rueda aplaudir las infinitas posibilidades que tiene un equipo, el Barcelona, que sólo necesitó llevar el pie al acelerador a diez minutos del final, y coincidiendo con 5 puntos consecutivos de Isaac López (44-53, minuto 30). Antes había gozado de ventajas de hasta 19 puntos (32-51). Pero en Pisuerga sólo le valía el triunfo. Y es lo que se llevó a la Cudad Condal... con el piloto automático puesto.
FICHA TÉCNICA:
59.- Blancos de Rueda: Dumas (2), Van Lacke (6), Diego García (13), Battle (7), Barnes (16) -cinco inicial-, Isaac López (10), Chase (5), Báez, Baldo y Davichu Ortega.
73.- Regal Barcelona: Sada (2), Navarro (4), Mickeal (6), Morris (20), Lorbek (17) -cinco inicial-, Ricky Rubio (7), Grimau (3), Fran Vázquez (6), Trías (2), Lackovic (6), Basile y Barton.
Árbitros: Mitjana, Martínez Diez y Castillo. Discreto el principal, flojo el debutante Castillo, y especialmente puntilloso con el Blancos de Rueda y amable con el líder el leonés Martínez Diez.
Parciales: 7-21, 17-16; 20-17 y 15-19.
Incidencias: Lleno hasta la bandera en el polideportivo Pisuerga, que registró la mejor entrada de la temporada para acoger la vigésimocuarta jornada de la Liga ACB.