MI DEPORTE Y MI AMISTAD
El deporte, ¡quién lo diría hace unos 30 años!, cada día la gente lo realiza con más regularidad en España,. Vemos por las calles, gimnasios, pinares, cada vez a más y más gente, bien sea en solitario o en grupo, haga frío o calor.
Será porque, tanto los que llevan tiempo practicándolo como los que llevan poco o están empezando, las sensaciones que tienen son tan diversas. Puedes evadirte de tu trabajo, del stress, de la vida cotidiana, etc. Con ese esfuerzo buscas una meta, y esa meta es estar contigo mismo a gusto, recortar tu propio récord en la carrera de 10 kilómetros que realizas a menudo, bajar peso, que te duela el cuerpo (sí, sí), y decir he terminado con la sesión del ¡qué bien me encuentro!.
Y básicamente en compartir si lo realizas con gente, la amistad, el diálogo y muchas veces creamos o no, en hacer un poco de negocio-amistad, todo el mundo creo que me comprende, se genera un rol que con el paso del tiempo se consolida y, como he dicho antes, la gente queda para transmitir lo que a menudo hace en su vida y crear una amistad, que por lo general dura bastante.
En esa amistad se puede decir que es como un matrimonio, se queda en grupo, unos van más deprisa que otros, uno le pega con la derecha, otro con con la izquierda, el otro sube los puertos más deprisa, otro nada mejor en 100 metros, otro aguanta 20 kms sin parar, y por dentro piensas ¡que tío mas rocoso, aguanta más que yo!. Es mi amigo, pero voy a ganarle, voy a entrenarme más. Llega el día siguiente, me vuelve a ganar, no puedo con él, voy a entrenar más. Llega una persona nuevo al grupo, le estoy ganado ya no soy el último, que bien he entrenado bien, lo que me propuse al principio lo voy consiguiendo, ¡que bien!
Todas estas conclusiones las saco porque ante todo debe prevalecer la amistad entre todos los amigos del grupo, club o gente que se reúne para caminar y charlar a medida que transcurren las horas de entreno. Porque no sólo entrenan los deportistas que compiten, también la gente que sale por ejemplo a andar, ya que por otras razones algunos sólo pueden caminar, o solo les gusta hacer eso. ¡Es su forma de entrenar!
Otro aspecto de reunirse con grupos a entrenar, es desahogarse, es contar como me ha ido la semana en el trabajo, mira qué problema tengo, me duele aquí, allá, etc. Por eso muchas veces habremos oído, los deportistas son de otra materia. Mentira. Somos todos iguales, lo único que el deporte te despeja, te hace sufrir y ser constante. Una cosa muy importante es que nos hace ser mas comunicativos y alegres en nuestra vida.
Yo os propongo que os fijéis algún día, en algún compañero de trabajo o amigo habitual que no haga deporte, y notaremos esa sensación a la que los otros compañeros que habitualmente hacemos deporte es distinta.
En conclusión, el deporte es droga, ¡¡¡pero de la buena!!!