EMOCIONES EN EL MES DE ENERO

Algo tendrá esta ciudad y sus gentes de particular. En el periodo más duro del invierno castellano, con días de niebla y mucho frío, año tras año miles de motoristas cruzan España entera para dormir en muchos casos prácticamente al raso y comer unos pinchos en unas carpas en un pinar. Además, cientos de personas acuden tradicionalmente al jardín de la casa de una conocida familia vallisoletana, a varios grados bajo cero, para comer un trocito de un cerdo enorme, que asan durante horas en una brasas. Y un club de rugby organiza un torneo para los niños de las categorías base, al que acuden más de 3.000 personas año tras año, atravesando España en coches y autobuses repletos de crios, entrenadores y familiares con la ilusión de jugar el Torneo de Invierno de El Salvador. INCREÍBLE.

Bueno, increíble no. La verdad es que la experiencia de recorrer las calles de Valladolid con miles de motos a tu alrededor es emocionante, el cerdo que hace esa familia esta buenísimo y el Torneo de Invierno de El Salvador es un auténtico espectáculo desde el punto de vista de las emociones. Creo que han sido 140 partidos, más de 1.300 niños jugando al rugby y 1.000 Kilos de alimentos recogidos para el Banco de Alimentos. Estas son las cifras del torneo. Sin duda cifras récord, pero el auténtico récord a mi entender y los verdaderos héroes de esta batalla son los miles de niños y padres que eligen un deporte como el rugby, niños que en muchos casos empiezan a jugar cuando todavía no saben ni leer, padres que apuntan a sus hijos a un deporte minoritario, con pocas competiciones, para muchos agresivo y violento, que no tiene eco prácticamente ni en prensa ni en televisión y que además te obliga en muchas ocasiones a cruzarte España con tus hijos para participar en torneos.

Algo tendrá que ver en todo esto las "emociones", esa sensación involuntaria que surge cuando te sientes orgulloso de participar en algo bueno. Una definición dice que las emociones sirven para establecer nuestra posición con respecto a nuestro entorno, y nos impulsan hacia ciertas personas, objetos, acciones e ideas. Yo creo que las emociones actúan como depósito y combustible de recuerdos que nos marcaran el resto de la vida y los que tuvimos la oportunidad de participar este mes de enero en el Torneo de Invierno nos llevamos el depósito lleno para mucho tiempo.

Felicidades a los padres y felicidades al Club.