Derrota en un partido "poco amistoso"

El Atlético Valladolid no pudo con un rival muy superior en la final del XVII Torneo Concello Do Rosal que se ha disputado en la localidad pontevedresa de O Rosal. El equipo vallisoletano cayó derrotado ante el FC Porto (24-21) en un choque que terminó de forma abrupta, ya que los árbitros decidieron suspender el encuentro debido a las continuas protestas del equipo portugués a las decisiones arbitrales.

Así, para evitar males mayores, los colegiados decidieron cortar el partido y enviar a ambos equipos al vestuario. Un encuentro que vivió una recta final de segunda parte con enorme tensión, pese a la categoría de amistoso, debido a las constantes protestas de los integrantes del equipo luso, que ya habían comenzado en la primera mitad y que fueron incrementándose en la segunda. 

Una lástima este final extraño ya que el partido debía ser otro momento histórico para el Atlético Valladolid ya que por primera vez en sus dos años de existencia se enfrentaba a un conjunto de la talla del FC Porto, campeón de la liga portuguesa las últimas siete temporadas y un habitual en la EHF Champions League. Y el Atlético Valladolid se tomó el partido como una prueba con la que medir la potencia de su plantilla y calibrar así detalles de juego que vendrán muy bien ante los rivales más duros de la División de Honor Plata.

Los de Nacho González salieron a disfrutar y divertirse, pero también a competir al máximo ante un rival muy superior físicamente. Los objetivos del Atlético Valladolid para esta final fueron probar cosas, intentar frenar el ataque portugués lo máximo posible y anotar todos los goles posibles. Todo para buscar sensaciones positivas de cara al inminente inicio liguero el próximo 6 de septiembre.

La primera parte de la final del torneo de O Rosal transcurrió como se esperaba: con un Oporto mucho más fuerte que el Atlético Valladolid, que se puso pronto por delante en el marcador. Los portugueses salieron muy enchufados y rompieron con facilidad el 5-1 inicial del Atlético Valladolid gracias su calidad individual. Además, sus transiciones hicieron mucho daño a la defensa vallisoletana. Los de Nacho González volvieron a una defensa 6-0 pero no lograron cortar la sangría y al descanso el marcador (17-9) evidenciaba la diferencia de categoría.

En la segunda mitad, el Atlético Valladolid salió más concentrado y activo. Los vallisoletanos subieron líneas en defensa y dieron más pausa a sus ataques con lo que lograron cortar las pérdidas y minimizar así los contraataques lusos. La línea ascendente del Atlético Valladolid se transformó en una remontada en el marcador (23-19) en el minuto 45. Sin embargo, aquí se incrementaron las protestas y enfrentamientos de jugadores y cuerpo técnico del Porto con los árbitros, que ya se habían iniciado en la primera parte. De poco sirvió la advertencia que realizaron los colegiados minutos antes, ante la dureza con la que se estaban mostrando los portugueses en el campo y la falta de respeto que ofrecían desde el banquillo.

24.- FC Porto: Quintana (1), Duarte (-), Morales (4), Rodrigues (1), Martins (-), Silva (2), Salina (3), Laurentino (portero), Gonçalves (-), Moreira (2), Sousa (portero), Santos (1), Areia (4), Roque (2), Landim (1), Kasal (3).

21.- Atlético Valladolid: Javi Díaz (portero), Diego Camino (1), Sergi Grossi (2), Alfonso de la Rubia (2), Fernando Hernández (7), Gonzalo Viscovich (-), Luisma Lorasque (-), Roberto Pérez (2), Roberto Turrado (2), Joel Gómez (-), Daniel Pérez (2), José Ángel Delgado Ávila (-), Filip Kallman (1), Nico López (1), Arturo Barcenilla (1) y César Pérez (portero).

Parciales cada 10 minutos: 7-4, 12-6 y 17-9 (descanso), 23-14 y 24-21.

Árbitros: Sergio Rodríguez y Andrés Rosendo.

Pabellón: Pabellón Municipal de O Rosal (Pontevedra). Final del XVII Torneo Concello Do Rosal.