Cielo o infierno

Este domingo a las 17.00 y en Huerta de Rey, los vallisoletanos pueden jugar su último partido de la historia. Un club histórico de la Asobal, que junto al Barcelona y Granollers, son los tres únicos equipos que han permanecido en la elite del balonmano, desde que se reconstruyera, allá por el año 1990. 

Las cuentas de los vallisoletanos son claras. Tienen que ganar al Guadalajara y esperar que no haga lo propio el Puerto Sagunto ante un Villa de Aranda salvado matemáticamente y que no se juega nada. A triple empate con estos dos equipos, el Cuatro Rayas Valladolid descendería. Tal vez por eso, el técnico vallisoletano reconoció que la victoria en león ha sido una de las más amargas de toda la historia. “El sábado ante en león se consiguió un importante triunfo, ante un equipo que lo dio todo para poder ganarnos. Pero ha sido una victoria sin sabor, después de los resultados que se produjeron. Todo eso no ha servido de nada y dependemos de otros equipos”. 

Para Nacho González, lo más importante es ganar al Guadalajara para dedicárselo a la afición. “Lo que tenemos que hacer es vencer, por nosotros mismos. Tenemos que despedirnos de Huerta de Rey, como se merece, con un triunfo. Es muy importante hacerlo bien y luchar, para que la gente se sienta orgullosa del equipo. Después de lo que ha pasado, los jugadores tienen un bajón anímicamente y estamos ayudándoles en todo lo que podamos, para motivarles de cara al partido”. 

González piensa que las posibilidades de salvación son escasas. “La cosa está complicada pero hay que mantener la esperanza hasta el último momento. Nosotros solo podemos pensar en nosotros mismos y después, que tenga que pasar lo que sea”. Y en esa segunda premisa entra el Villa de Aranda. “Creo en los valores del deporte y en la honestidad de los equipos. Espero que luchen hasta el último segundo". Una imagen que no se vio en el último partido de los arandinos en casa ante Gijón. "Cada uno en su casa hace lo que quiere. En mi casa, intento ganar y más si es el último partido", matizó el técnico vallisoletano. 

Nacho González no quiere pensar que pueda ser el último partido de la historia del club. “Soy socio desde hace muchos años, trabajador y entrenador del club. Durante la semana si se nos ha pasado por la cabeza que pueda suceder. Pero nosotros no hay que pensar en eso, sino terminar la liga con la cabeza alta”. 

Respecto al futuro del club, el técnico no sabe nada. “No nos han explicado nada durante toda la semana. A día de hoy, se acabará el año y después ya se verá. La junta directiva tendrá que valorar si se puede seguir o no. La plantilla no ha sido informada de lo que pasado en la reunión entre el presidente y el administrador concursal”, desveló González. 

Sobre Guadalajara, el entrenador vallisoletano recordó que fue una de las canchas donde, en la primera vuelta, se hizo el ridículo. “Este equipo nos sacó de la pista cuando se jugó en su campo. Nos ganaron, muy cómodos y fácil. Tienen un lanzamiento exterior bueno, con Valadao en el lateral izquierdo, que está en la selección brasileña. Los centrales Víctor Vigo, que ha realizado una excelente campaña, junto a Enrique Plaza, que posee un buen lanzamiento. Y luego dos zurdos, como Iago Muiña y el portugués Jorge Felipe, que pueden chutar desde atrás. Hay que jugar muy duros e intensos durante todo el partido”.  

Para el partido ante el Guadalajara, Nacho González tiene las dudas de Nico López e Ismael Juárez. “Nico es seria duda, en el partido ante el león tiene una rotura y se le salió el dedo, un poco, está bastante dañado y veremos a ver lo que pasa. Es una baja importante porque en defensa nos estaba ayudando mucho. Y luego Ismael, tiene una sobrecarga en el gemelo y habrá que ver la evolución, hasta el domingo”.