Lamariano y Peciña se felicitan en un partido en Huerta del Rey. FOTO: Mariano González
Lamariano y Peciña se felicitan en un partido en Huerta del Rey. FOTO: Mariano González
Lamariano y Peciña se felicitan en un partido en Huerta del Rey. FOTO: Mariano González
 |  Liga Asobal

25-27: Prácticamente magia

17 de Mayo de 2014
Escrito por
Guillermo Sanz
La historia se vistió de amarillo en León para apoyar al Cuatro Rayas. El equipo vallisoletano necesitaba cruzar el primero por la meta en una carrera por un campo de minas para que su futuro esté en sus manos y así lo hizo, repartiendo dosis de seriedad, talento, suerte y milagros a tazas casi iguales. 


León quería despedir el año en su pabellón con una victoria y salió con la luz de avalancha encendida, relamiéndose ante un Cuatro Rayas que se mostraba plano en defensa y espeso en ataque. El Ademar golpeó primero (4-1), acomodándose en la media distancia, donde Dacevic valló su territorio,  y sólo el fuerte mentón de Lamariano evitó que los vallisoletanos besaran la lona pronto. 


La defensa pucelana recargó sus pilas y el conjunto de Nacho González probó a llamar a la puerta del partido (5-5), con Fernando Hernández como cabecilla del grupo. A León se le había apagado el fuego e intentó buscar en el pivote lo que antes le daba el lanzamiento exterior. Piñeiro cumplió y las aguas volvieron a correr por el cauce de los primeros minutos (11-8), hasta que Cacheda decidió sacar a pasear su fantasía y Fernando sus pulso de killer (11-11). 


Toma, daca y vuelta a empezar entre leoneses y vallisoletanos. El Cuatro Rayas pudo romper esa dinámica, pero Fernando Hernández se topó con Asanin, que evitó que el marcador se moviera del 15-15 con el que se llegó al descanso. 


Los pupilos de Nacho González comenzaron el segundo periodo en superioridad. Dacevic empeoró el panorama para el Ademar, que jugó algo más de un minuto con cuatro jugadores de campo. El Cuatro Rayas vio luz en el camino y no dudó en apretar el paso para imponer un parcial de 0-3 que provocó el cosquilleo en el banquillo de Dani Gordo. El técnico pidió un tiempo muerto para intentar regar la sequía que castigaba al conjunto ademarista. Piñeiro sirvió una ración de agua insuficiente para recortar del equipo pucelano, que buscaba al pivote para fabricar siete metros como rosquillas (17-20). 


Asanin levantó el muro en su portería para frenar a un Cuatro Rayas que se mostraba lúcido para dosificar una renta que se disparó hasta los cuatro goles cuando Nico López se disfrazó de locomotora para dibujar el 19-23 en lo alto del Palacio de los Deportes de León. 


El Ademar despertó para poner tabasco al partido. Después de remar a lo largo el Amazonas, el Cuatro Rayas se encontró con el marcador de nuevo igualado (25-25) y con dos jugadores menos sobre el parqué. Fue entonces cuando los vallisoletanos saltaron esa barrera que separa lo extraordinario de lo cotidiano. Gonzalo Porras metió lo imposible, Lamariano jugó a multiplicarse para hacer rebotar la puntilla, y Cacheda puso la guinda a un postre digno de Paco Torreblanca (25-27), servido en la misma bandeja de plata en la que el Cuatro Rayas tiene la salvación. 


FICHA TÉCNICA DEL PARTIDO: 

25.- ADEMAR DE LEÓN (15+10): Asanin (p), Carrillo (3), Dacevic (4), Castro (2), Carou (1), Mario López (7, 1p), Almeida (-), Mellado (-), Tatarintsev (1), Piñeiro (4), Vega (-), Díez (-), Molina (-) y Llamazares (p.s.). 


27.- CUATRO RAYAS VALLADOLID (15+12): Lamariano (p), Megías (1), Corzo (4, 2p), Ávila (-), Peciña (-), Nico (1), Isma Juárez (1), Fernando Hernández (6,2p), Cacheda (7, 2p), Porras (3), Paco López (4) y Roberto Pérez (-). 


 Parciales cada cinco minutos: 4-1, 5-4, 6-7, 11-9, 14-13, 15-15 -Descanso- 16-18, 17-18, 18-21, 21-23, 23-24 y 25-27 -Final- 


Árbitros: Muro San José y Rodríguez Murcia. Excluyeron dos minutos a Piñeiro, Dacevic (2), Carou y Mellado, por parte del Ademar de León, y a Fernando Hernández, Peciña (2), Ávila (2), Nico López, Corzo y Roberto Pérez, por parte del Cuatro Rayas Valladolid.


Incidencias: Partido correspondiente a la penúltima jornada de la Liga Asobal, celebrado en el Palacio de los Deportes de León ante, aproximadamente, 2.000 espectadores. En los prolegómenos del encuentro se guardó un minuto de silencio en memoria de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, fallecida el pasado lunes.