Sin mirar al futuro

Son jóvenes, han demostrado que pueden competir en ACB y su evolución, pese al poco tiempo que llevan en el CB Valladolid, ha sido constante. El club, de hecho, se aseguró su continuidad de cara a la próxima campaña. Pero ni Pepe Pozas ni Djordje Drenovac saben qué va a pasar a partir de junio: “El objetivo es acabar la temporada, luego hablaremos”, declaraba el serbio, aunque reconocía que “estoy muy feliz aquí, donde he mejorado mucho desde que llegué”. Por su parte, el base malagueño se muestra cauto, ya que la imprevisibilidad del deporte ya se cruzó en su camino hace unos meses: “Estoy contento de tener la posibilidad de seguir, pero nunca se sabe lo que va a pasar. El pasado junio yo tenía cerrada la cesión a Obradoiro y al final me quedé sin contrato”, comentaba Pozas.

Sin objetivos marcador a nivel de liga, con la penúltima plaza convertida en un lejano anhelo, ¿qué queda para la plantilla del CB Valladolid?: “El trabajo diario y el orgullo, en eso tenemos que pensar”, apuntaba Pepe Pozas, mientras que Drenovac señala que “hay que jugar partido a partido cada vez más duro e intentar mejorar”. Pobres objetivos pero, en la situación actual, los únicos factibles para un equipo al que le sobran las jornadas que quedan.

Porque de haber ganado a Iberostar Tenerife, junto con la derrota de Manresa, eludir la última plaza podría haberse visto más cerca pero, en opinión de Pozas, “el partido se lo iba a llevar el que primero se pusiera a defender”. El bloque sufrido en el tercer cuarto intentó argumentarlo Drenovac aludiendo a “un bajón por muchas razones. El equipo necesita más confianza en sí mismo pero al final no responde”, terminaba el serbio.