Óscar Simón, en el centro, comunicó a los medios la decisión. FOTO: V.D.
| Balonmano Valladolid
El club solicita entrar en Concurso de Acreedores
10 de Marzo de 2014
El vaso se desbordó. Después de muchas negativas por parte de Óscar Simón de meter el Concurso de Acreedores entre las cartas a jugar para revertir la delicada situación por la que atraviesa el club, la cúpula directiva, con Simón a la cabeza, ha tenido que replegar ante la Ley Concursal. Así lo ha hecho saber este lunes el máximo responsable del Balonmano Valladolid: "La junta directiva, el pasado 3 de marzo, solicita ante el Juzgado de lo Mercantil entrar en Concurso de Acreedores. Las causas que han llevado a tomar esta decisión ha sido la imposibilidad de hacer frente a todos los pagos del mes de febrero y la ejecución por parte de Raúl Torres de la sentencia, con el correspondiente embargo de las cuentas del club".
A partir de ahora, el club comienza una "nueva andadura. Esta junta directiva seguirá trabajando por el presente y el futuro del club", como promete Óscar Simón. Pendientes de que se acepte esa petición de Concurso de Acreedores y que un administrador concursal se encargue de analizar la viabilidad del club, el presidente estima que esta nueva realidad "No es el fin del mundo"; es un "hecho necesario", un "ejercicio de responsabilidad" desde el momento en el que la ejecución de la sentencia por parte del exgerente del club ha propiciado el embargo de las cuentas de la entidad vallisoletana: "La situación económica es ahora mejor que hace doce meses. ¿Por qué hace un año no entramos en Concurso de Acreedores y ahora sí? Porque hemos ido cubriendo los compromisos sin que nadie nos hubiera ejecutado. Ha sido la gota que ha colmado el vaso. Una vez que nos han embargado las cuentas, por un ejercicio de responsabilidad no nos queda otra que presentar el Concurso de Acreedores", declara Simón.
El presidente del Balonmano Valladolid remarca que el club no despidió a Raúl Torres y que la intención de llegar a un acuerdo con el exgerente del Balonmano Valladolid llegó tarde: "Pedía una indemnización de 12.000 euros y 55 días por año trabajado, lo que fue rechazado por el juzgado pertinente. Con fecha del 29 de mayo, pidió la baja por enfermedad común. Él ya había solicitado la baja; el club no le despidió", declara, y añade: "Yo estaba esperando la llamada de su abogado, que no se produjo, para tener una reunión y llegar a un acuerdo. La respuesta que hemos tenido ha sido la ejecución de la sentencia y el embargo de las cuentas bancarias. Es verdad que me llamó el pasado jueves, una vez embargadas las cuentas, para decirnos que quería llegar a un acuerdo. A mal acuerdo íbamos a llegar cuando el proceso ya había sido iniciado", lamenta.
El Cuatro Rayas toma el camino de la Ley Concursal que ya han cogido otros equipos Asobal como Aragón, Granollers y Ademar de León; tres ejemplos de equipos "completamente operativos", que hacen no perder los nervios ante la nueva situación que vivirá el club vallisoletano.
¿Qué se encontrará el administrador concursal en las cuentas del Balonmano Valladolid? Óscar Simón puso los números sobre la mesa e hizo pública la contabilidad del club a 28 de febrero, fecha en la que la entidad tiene 150.000 euros de beneficio, a demás de una deuda que ha pasado de 1.733.000 a 1.582.994,94, siendo Hacienda, con 700.000 euros, su mayor acreedor. Cerca de 200.000 a la Seguridad Social, 116.000 a proveedores y acreedores, 398.000 euros a personal de temporadas anteriores y actual y 200.000 a entidades bancarias redondean una roca de mucho peso para las arcas del club. Pese a todo, Eduardo Toquero, encargado de administración y contabilidad, asegura que esta temporada "se va a terminar con un superávit, contabilizando las indemnizaciones a Fernando Ramos y Raúl Torres, que irá destinado a amortizar la deuda", concluye.
Los patrocinadores, conocedores de la nueva situación, han manifestado al club mantener su compromiso con el Balonmano Valladolid, único punto que celebra Óscar Simón.