Hambre de competición

Cuando llega la hora de la comida se enciende una alarma en el estómago. Se queja y suena un ruido que avisa de la llegada del hambre. En el deporte pasa algo parecido. Cuando se acerca el fin de semana, comienza a sonar la alarma. Un rugido hace eco en los entrenamientos del Cuatro Rayas Valladolid, donde se cuentan las horas que quedan para el siguiente partido. Apenas ha pasado una semana desde que el conjunto vallisoletano pegó su último bocado. Fue en Granollers, donde, pese a la derrota, el encuentro dejó un regusto en el paladar que pide a gritos más. Así lo asegura Nacho González: "La gente tiene ganas de competir. Eso es un síntoma muy positivo".

El plato que se servirá el sábado en Huerta del Rey (20.00 horas) no será de fácil digestión para los pucelanos. Aitor Etxaburu es un chef en gastronomía navarra y prepara un plato fuerte que lo convierte en "uno de los partidos complicados de casa, junto a Granollers"; un par de peldaños por debajo de Barcelona y Naturhouse, a juicio del entrenador vallisoletano. 

Helvetia Anaitasuna se despertó en la nueva temporada tropezando con la alfombra. Derrota en Cangas. Una falta que fue expiada siete días después venciendo con autoridad al Balonmano Aragón. Un arranque con altibajos para un club con las miras puestas en un punto más alto que las temporadas anteriores: "En los últimos años, había equipos que parecían no tener objetivos claros. Les faltaba ese punto para estar arriba, que creo que este año lo pueden conseguir, lo que les hace más peligrosos todavía", asegura Nacho González. 

La clave para conseguir la segunda victoria en Huerta del Rey pasa por frenar las travesuras de Montávez y Reig. Si se frena a Zipi y Zape, el Cuatro Rayas tendrá "muchas posibilidades" de quedarse con los dos puntos. Para conseguir tener maniatados al pivote y al central, Nacho González aún no sabe si podrá contar con Guillermo Corzo y César Pérez. Ambos causaron baja en Granollers y su presencia ante Anaitasuna es toda una incógnita. El cubano evoluciona satisfactoriamente. Se incorporó a los entrenamientos durante la presente semana y el técnico vallisoletano se muestra optimista sobre su presencia en la pista el sábado. Otro caso es el del canterano, que parece que no podrá ser de la partida ante los navarros. La intención de Nacho González es "no forzar a nadie. La Liga es muy larga y les necesitaremos más adelante", como asegura con rotundidad.

Con o sin Corzo y César, el cuadro amarillo tiene que continuar recogiendo el fruto de su trabajo diario. Si del árbol no sale fruta, haber plantado no sirve para nada: "Estamos trabajando muy bien, pero una cosa es trabajar bien y otra es puntuar. El trabajo sin resultados no tiene sentido", concluye Nacho González, que espera continuar con la vendimia de puntos en el majuelo de Huerta del Rey.