28-18: El Cuatro Rayas se levanta con el pie derecho

Los andaluces se toparon de primeras con el más madrugador de la clase, Yeray Lamariano. El eibarrés empezó desde el minuto cero a cuajar una gran actuación, frenando el ímpetu de un Puente Genil falto de ideas. El primer tramo del partido se convirtió en una conversación entre Fernando Hernández y Dani Arguillas. El veterano dio una lección que el guardameta escuchaba mientras la cuenta se engrosaba del lado vallisoletano. Lacasa hizo el resto con dos latigazos que dejaba una dosis de tranquilidad en el botiquín pucelano (6-2). 

A la fiesta se sumó el cubano Guillermo Corzo, dejando destellos de calidad para la galería y poniendo los nervios en el banquillo de Antonio Ortíz, que tuvo que recurrir a un tiempo muerto para intentar alisar un camino que se le había puesto cuesta arriba (10-5). Fue entonces cuando el equipo cordobés mostró su mejor arma: la solidez defensiva. Se complicó el panorama a golpe de músculo y seriedad en la retaguardia andaluza. El antídoto, el juego de manos de César Pérez, que imprimió velocidad en la circulación del balón, mareando la bola hasta encontrar un hueco en el que colarse.

La primera parte llegó a su recta final con un intercambio de golpes que cerró De la Sierra desde los siete metros para colocar un 18-13 en el luminoso.

El paso por los vestuarios pareció refrescar las cabezas andaluzas. Stanislav Demovic tiró de galones y volvió a la pista con los dientes afilados, mostrando sus credenciales. Con dos cañonazos consecutivos el eslovaco apretó el marcador. No fue más que un espejismo. Isma Juárez, desde lo siete metros, se encargó de chafar las esperanzas del Puente Genil. 

El Cuatro Rayas volvió a pedir el turno de palabra. Lamariano mandaba silencio y Juárez continuaba su exposición, secundado por la sensible hiperactividad de Alberto Camino; un don que será de gran utilidad a lo largo de la temporada para los planes de Nacho González. El equipo vallisoletano indicaba el camino a seguir y el Puente Genil se dejó llevar hasta que el partido se quedó sin historia (19-13). Sólo Guillermo de la Sierra parecía ser capaz de cambiar alguna coma en el guión. 

Con el encuentro encarrilado, el técnico vallisoletano dio minutos a David Fernández. El juvenil saltó al parqué como si lo hiciera todas las semanas desde hace mucho tiempo. En unos pocos minutos dejó varias notas a tener en cuenta. Saltó con desparpajo, sin miedo y con ganas de hacer su primer gol en Asobal, hito que conquistó, llevándose como premio la ovación de un Huerta del Rey que disfrutó de un equipo que continuó cavando hasta el 28-18 final. 

Como exigía Nacho González en la previa, el feudo amarillo se cerró herméticamente. Los puntos no volaron y el Cuatro Rayas completa una jornada redonda en la que se levantó con el pie bueno.

FICHA TÉCNICA 

28.- CUATRO RAYAS VALLADOLID (13+15): Lamariano (p.), Porras (3), Lacasa (2), Fernando Hernández (4, 2p.), Corzo (5, 2p.), Alberto Camino (3) y Ávila (-) -Siete inicial- También jugaron: César Pérez Verdejo (p.s.), Peciña (-), Juárez (4, 2p.), Paco López (2), César Pérez (-), Bozovic (2), Megías (2) y David Fernández (1). 

18.- ÁNGEL XIMÉNEZ PUENTE GENIL (8+10): Arguillas (p.), Olea (1), Jorge Sánchez (1), Nacho Moya (2), Cuenca (2), De la Sierra (6, 3p.) y Demovic (3) -Siete inicial- También jugaron: Chirosa (p.s.), Fuentes (1), Francisco Muñoz (1), Mario Porras (-), Nacho Soto (-), Morales (-), Alonso (1, 1p.) y Baena (-). 

Parciales cada cinco minutos: 1-1, 6-2, 8-4, 10-5, 11-7, 13-8 -Descanso- 13-10, 15-10, 18-13, 21-14, 24-16, 28-18 -Final- 

Árbitros: Jesús y Jorge Escudero Santiuste (Federación Cántabra). Excluyeron dos minutos a Ávila (Min.10), Alberto Camino (Min.32) por parte del Cuatro Rayas, y a Olea (Min.6), Jorge Sánchez (Min.35) por parte del Ángel Ximénez Puente Genil.