Amarillo y Plata

El dinero llama al dinero y la "plata" llama a la Plata. Este singular juego de palabras puede resumir el futuro de la sección femenina del Balonmano Valladolid, el Aceitunas Olibher, que necesita cubrir un presupuesto de 20.000 euros para formalizar su presencia en División de Honor Plata; un derecho ganado sobre la pista. 

La asamblea de la Real Federación Española de Balonmano, celebrada este sábado en el Hotel Husa Príncipe de Madrid, dejó salvado el primero de los escollos. La nueva distribución de la categoría de plata dejará a la división dividida en cuatro grupos de diez equipos cada uno, distribuidos por regiones geográficas. Un nuevo plano de situación permite ascender a 20 de los 24 equipos integrantes en la fase de ascenso; un grupo en el que estaba incluido el Aceitunas Olibher Balonmano Valladolid, décimo clasificado en la terna. 

Con una ocasión de plata en la palma de su mano, aparece otra valla que sortear, la que coloca sobre el camino del ascenso el factor económico. El Aceitunas Olibher Balonmano Valladolid tiene que hacer malabarismos para conseguir los 20.000 euros que se han marcado para dar forma al presupuesto general. 

Los responsables del equipo trabajan contrarreloj para poder llenar el silo antes del 8 de julio, fecha límite para presentar la ficha de inscripción. Desde el club se espera poder seguir contando con la importante colaboración de Aceitunas Olibher como patrocinador oficial, tras un exitoso año respaldando a la sección femenina. Pero aún en caso de contar con el apoyo de la empresa vallisoletana, los encargados de dirigir el Balonmano Valladolid femenino deberán hacer malabarismos para completar un presupuesto que estiman tener controlado en un 60%, aproximadamente. 

Un canon de 1.000 euros, hasta 3.5000 euros (dependiendo del número de equipos canarios que se inscriban en Plata) para abonar el pago de fondo de compensación para la participación de los clubes insulares, desplazamientos, arbitrajes, pista... la lista de gastos se hace casi eterna. Desde la zona de gestión del equipo, no se quiere hacer números, de momento, contando con las posibles ayudas procedentes de organismos públicos, como explica Rubén Carrasco: "No quiero esperar a subvenciones para este año", asegura; de tal manera que los 20.000 euros que marca la partida presupuestaria deben estar a salvo en el bolsillo antes del día 8 para que Valladolid pueda contar con un equipo en División de Honor, el Aula Cultural, y otro en Plata, el Aceitunas Olibher Balonmano Valladolid. 

Pese a que la presencia del equipo vallisoletano en División de Honor B obliga a mostrar dotes de funambilista con el dinero, el entrenador del conjunto femenino confía en seguir cumpliendo un sueño bañado en plata: "Los ánimos me dicen que el equipo va a salir", asegura Rubén Carrasco, que tiene varios motivos para luchar por el ascenso; además del deportivo. En su mente está la cantera: "Nuestra intención de que salga adelante es también para que las categorías inferiores vean que hay futuro". 

La base es el futuro del balonmano local; por esta razón, si el equipo confirma su presencia en la categoría de plata del balonmano femenino español, Carrasco confiará en las chicas que hicieron los deberes, con nota, la pasada campaña, aunque mirando de reojo la posibilidad de realizar algún pequeño retoque: "Quiero mantener todo el equipo. Son ellas las que lo han conseguido, pero para estar en Plata también hay que tener a gente con un nivel".