Confianza ciega

Pastor y Jota, Jota y Pastor. Un año más los que fueran capitán y grumete vuelven a verse las caras y es ese encuentro el que envuelve a los partidos entre Cuatro Rayas y Naturhouse con un halo de atractivo especial. Un duelo de materia gris del que, por primera vez el aprendiz parte con ventaja. Los riojanos se han armado hasta los dientes este año, convirtiéndose en una alternativa al binomio arrollador de Atlético de Madrid y Barcelona.

Ambos conjuntos se enfrentarán con el firme objetivo de conseguir los primeros puntos de la temporada. Los vallisoletanos fueron sorprendidos por el Villa de Aranda en Huerta del Rey, mientras que los riojanos cayeron en su duelo contra el Atlético de Madrid en Vistalegre. Así, con el casillero a cero, Pastor buscará amargar el domingo de Jota, y viceversa (20.00 horas-Teledeporte). Para ello, el técnico del Cuatro Rayas considera clave “confiar en el compañero” para mejorar en defensa y encontrar la llave de un juego más fluido que el ofrecido ante los burgaleses la semana pasada.

La primera salida del Cuatro Rayas no será, ni mucho menos, un caramelo. Enfrente esperan Garabaya, Paván, Curuvija o Tioumentsev, “que dirige bien, chuta y que tiene más rendimiento cuantos más minutos juega”, explica Pastor. El Naturhouse ha reunido a una auténtica manada de lobos feroces y organizados que “saben ya lo que deben hacer”, a los que el técnico amarillo aspira a morder: “Va a ser un partido complicado pero intentaremos disputarlo y estar en él para tener opciones de hincarles el diente. Para eso es fundamental estar juntos y mantener la concentración defensiva”.

Para que el barco llegue a buen puerto las piezas más jóvenes deben aprender a pasos agigantados, un reto que pone a prueba la paciencia del entrenador del Cuatro Rayas: “Cuento hasta tres y, a veces, hasta diez con los jóvenes, porque se olvidan de poner en práctica lo que les he dicho”. Sin embargo, la paciencia del técnico se dilata por la predisposición a aprender de los jugadores: “Llevaría mal la falta de actitud o la desidia y no es el caso”, reconoce el técnico.

Con Ávila y Krivokapic todavía en proceso de recuperación y con la opción de Peciña aún en el aire, el fruto de la cantera tendrá que cargarse con el peso del partido en sus espaldas. Las bajas no sólo influyen en la competición, también en el tiempo de entrenamiento, como asegura Pastor: “Sin entrenamientos de calidad es complicado mejorar”.

La enfermería del Naturhouse también tiene su particular colapso. Jota podría contar para el encuentro del domingo con Niko Mindegia, no así con el Cubano Capote y Velasco, que siguen ultimando su recuperación y parecen descartados para el choque contra el Cuatro Rayas.