Óscar Simón, en el centro, escoltado por parte de su directiva. FOTO: valladoliddeporte
Óscar Simón, en el centro, escoltado por parte de su directiva. FOTO: valladoliddeporte
Óscar Simón, en el centro, escoltado por parte de su directiva. FOTO: valladoliddeporte
 |  Cuatro Rayas Valladolid

Un plan de cinco años para saldar la deuda

24 de Enero de 2013
Escrito por
Guillermo Sanz

El nuevo presidente del Cuatro Rayas Valladolid tiene en su cabeza todo atado y bien atado. En el mar de los números, Óscar Simón se desenvuelve como un delfín; se siente cómodo nadando a contracorriente y, una vez vistas las cuentas del club, parece que los números rojos que pesan a la entidad son un lago sin olas para él.

Simón no quiso dar a conocer la cuantía exacta de los plomos que el Balonmano Valladolid tiene atados en los tobillos, pero sí que confirmó, una vez vistas las cuentas, que esa fila de números rojos coincide con lo publicado en los medios de comunicación, una cantidad cercana al 1.800.000 euros: “Lo que queremos ser es transparentes, en medida de los posible. Las cifras que publicasteis son correctas”, corrobora; sin embargo, esos números no escandalizaron al nuevo presidente: “Yo esperaba más deuda, y es una alegría. Las cifras son más positivas de lo que podía prever”, asegura.


La cifra no ha provocado un cambio en el ritmo cardiaco de Óscar Simón, que ya se encuentra rodeado de su nueva directiva de transición. Vicente Orihuela, Vicente Hernández, Hugo Ureta, Juan Barco, Juan Carlos Gonzalo y Javier Martínez, colaboradores y patrocinadores del club y supervivientes de la era Dionisio, moldean el esqueleto de un organigrama que seguirá tomando forma a lo largo de los meses. Sobre el hecho de que parte de la antigua directiva entre en el nuevo organigrama, el nuevo alto cargo hace bueno el dicho que reza eso de no buscar fuera lo que tienes en casa: “Son gente válida, con ilusión y con ganas de trabajar”, declara Simón, que ya avisó que no haría ninguna revolución a mitad de temporada.  


Rodeado de un grupo de confianza, con experiencia en la anterior directiva, Óscar Simón comenzará la remontada económica del Balonmano Valladolid. La hoja de ruta del nuevo presidente del club vallisoletano fijó en un lustro el final de la ya histórica deuda que ha sobrevolado Huerta del Rey los últimos años: “Esta directiva va a dejar al club saneado en cinco años. Hay un plan para que el Cuatro Rayas Valladolid no deba nada a nadie en ese tiempo”, asegura.


Para que los libros de cuentas reciban el alta médica, lo primero es actuar desde la raíz. Un lustro es mucho tiempo y el club sufre una serie de “problemas puntuales” que deben ser curados con la mayor inmediatez posible. “El pago de las nóminas de diciembre se va a efectuar la semana que viene; y en los primeros días los empleados cobrará enero. No estábamos acostumbrado a eso últimamente”, recuerda Óscar Simón, que asegura que se está “metiendo una inyección de dinero para solucionarlo”.


Óscar Simón continúa haciendo nudos para que la temporada que viene no quede ningún cabo suelto en su balance de contabilidad. El máximo dirigente del Cuatro Rayas ha asegurado que en las próximas fechas la lista de patrocinadores del club se irá engrosando con pequeños y, probablemente, grandes patrocinadores; esto trae consigo un efecto dominó que deja una previsión del presupuesto del año próximo mucho más optimista: “Si los patrocinadores actuales siguen y se incorporan unos nuevos, no hace falta saber matemáticas para ver que el presupuesto será mayor el próximo año”, declara Simón, que a su vez recuerda que más dinero en las arcas no significa necesariamente una mayor inversión sobre el parqué. Amortizar la deuda es la primera bala en su canana.    


En lo económico, Simón parece tener la rueca engrasada; pero el aspecto deportivo se ha convertido en la cara oculta de la luna.No poner nombres sobre la mesa no es óbice para que la presencia de Óscar Simón en el sillón presidencial devuelva la ilusión a muchos socios que, como estima el presidente, han vuelto a casa para recuperar el carné de abonados.


Por el momento no habrá fichajes. Simón reiteró su confianza en la plantilla actual y en Juan Carlos Pastor en la charla de bienvenida que mantuvo con los jugadores. Simón les informó de que creía en ellos para la meta de la permanencia y, después de comunicarles que el pago de las nóminas atrasadas se haría efectivo esta semana, vio al equipo “tranquilo e ilusionado”, y, es que, “Con el estómago lleno, se trabaja mejor”.