Oscar Perales: "Estoy preparado para lo que me toque vivir"

Un hombre optimista por naturaleza vive estos días preocupado. El central del Cuatro Rayas Valladolid Oscar Perales será operado la próxima semana de la lesión de rodilla que se produjo hace casi quince días en Portugal.

Una lesión que en un principio se diagnosticó para siete semanas pero que el jugador teme que sea para mucho más tiempo, una vez sea intervenido por los doctores. "Estoy preparado para lo que me toque vivir. Es mi primera lesión grave y sé que va a ser duro pero confío en sacarlo adelante".

Perales reconoce que, tanto él como el club, "nos estamos planteando todas las opciones posibles. Puede ser un periodo de recuperación de siete semanas pero también que se puede alargar hasta los siete meses si finalmente hay que intervenir el igamento cruzado de la rodilla, algo que todavía no se sabe al cien por cien".

Es su primer percance serio como jugador de balonmano pero recuerda perfectamente cómo se produjo. "Fue en un contragolpe, donde yo iba sólo, pero un rival me tocó con su rodilla en la mía y ahí ya noté algo raro. Luego, para colmo, al caer se me fue totalmente la rodilla y un dolor muy agudo que no había tenido nunca". Lo curioso del caso es que aparentemente la rodilla está bien y el jugador puede hacer vida "casi" normal. "No se ha hinchado y yo no tengo sensación de tener lesionado y eso casi me desespera más".

En esa situación ve a sus compañeros entrenar y preparar la previa de la Liga de Campeones, y reconoce que lo llevará peor cuando haya pasado la operación. "Por ahora me dejan estar con ellos y vivir un poco el día a día en el vestuario. Lo duro será cuando esté en la cama, en casa, en la recuperación y con demasiadas horas para pensar. La soledad es lo que peor se lleva aunque sé que tiene que ser por mi bien".

Animos para la Champions

No podrá estar con ellos pero Perales confían plenamente en sus compañeros para la cita de este fin de semana en Polonia. "Va a ser complicado pero yo confío en mi equipo aunque ellos estén en casa y con su ambiente". Y es que el central cántabro recuerda que "el Valladolid es capaz de lo mejor y lo peor y muchos rivales saben que nosotros podemos ganar a cualquiera. Ojalá esta vez les podamos dar un buen susto".

No sabe si lo podrá ver por televisión, no porque no lo den, sino porque "los nervios me dejen. Si se pasa mal en la grada, si encima estoy en casa y a miles de kilómetros, por mucho que grite no voy a poder ayudar más".

Eso sí, Perales tiene claro que pase lo que pase en Polonia la ilusión del equipo seguirá intacta. "Vamos a ir paso a paso y cuando pase este torneo ya habrá momento de hacer balance. El Valladolid tiene que aspirar siempre a lo máximo pero si no es en la Champions afrontaremos la competición europea que nos toque con la misma ilusión".