La incógnita del parón
El problema de pararse a tomar aire en una carrera de fondo es no saber cómo va a reaccionar el cuerpo cuando las zapatillas vuelvan a coger el ritmo. El mismo interrogante se dibuja cuando el tren de la Liga se detiene para dejar paso en las vías a los compromisos internacionales, y al vagón del Cuatro Rayas le han dado el alto cuando empezaba a coger la velocidad punta.
Un parón cuando estas en una dinámica buena no sabes si va a ser bueno o malo, reconoce el técnico del conjunto vallisoletano Juan Carlos Pastor. Ahora toca coger aguja e hilo para coser la racha con la que se llegó al parón liguero con una nueva que permita alejarse de la zona de peligro: Hemos sacado un poco la cabeza, pero si hubiéramos perdido en Palma estaríamos últimos. Hay un grupo de equipos que están a muy pocos puntos y cuanto antes cojamos aire mucho mejor, asegura.
El paréntesis se ha colocado en el peor momento posible para el Cuatro Rayas, después de conseguir un botín de cinco puntos, de los últimos seis jugados. Al otro lado del espejo se encuentra el CAI Aragón, al que el parón le ha llegado como agua de mayo, después de sumar tres derrotas en los últimos cuatro partidos. Granollers, Huesca y Villa de Aranda han sido los terremotos capaces de tambalear los cimientos del equipo de Mariano Ortega, tras un inicio de campaña ilusionante.
En medio del plantel aragonés luce canas una torre de mármol: Asier Antonio. El que fuera lobo en la manada de Pastor puso rumbo a Zaragoza el pasado verano y el sábado (20.00 horas) vuelve a la lobera en la que moró los últimos ocho años. Asier ha sido una parte decisiva en nuestro engranaje y una parte importante en la historia del club. Nuestra defensa pretoriana nos daba muchos goles de contraataque, recuerda Pastor, que aún tiene fresca la imagen del gigante vasco, a la vez que explica por qué Asier no viste aún el amarillo: No pudo ser en aquellos momentos porque la oferta era la que era, y para mí fue una pena. Cuando fuimos al final a por él, ya había dado su palabra, lamenta el técnico vallisoletano.
El pivote irundarra suma veteranía en la balanza de un equipo que conjuga juventud y experiencia, en la que figuran nombres que sonaron con fuerza en los despachos del Cuatro Rayas: Han fichado a gente importante que nosotros no hemos podido, cuando ya les teníamos apalabrados, como es el caso de Alex Dujshebaev, una pieza más en un equipo capaz de ganar partidos desde el contraataque gracias a la velocidad de extremos como Cartón, bien escoltados por Vigo y Casanova.
Frenar a la locomotora maña pasa por intentar hacer las cosas como antes del parón, sintiéndonos cómodos en defensa. La retaguardia y el apoyo del público son las bazas que guarda Pastor debajo de su manga. sin embargo, es consciente de que el apoyo de la grada, que ya llevó en volandas al equipo en la victoria ante Granollers, no es gratuito: El apoyo del público es fundamental. Les tenemos que ofrecer algo para que se anime. Ánimos por juego; el trueque parece justo.
Pastor espera que, para poder ofrecer al foro de Huerta del Rey lo que piden, la cabeza esté dentro del juego que se desarrolle sobre el parqué y que agentes externos como la denuncia que el ex del Cuatro Rayas, Davor Cutura, presentó esta semana al club, no desestabilice al grupo: Vamos a intentar que esto no trastoque la situación. Cualquier revés económico en un club frágil en la faceta monetaria es como abrir una ventana cuando se está levantando un castillo de naipes: un peligro. Sin embargo, el técnico mostró su confianza plena en los encargados de la gestión económica y apostó por el diálogo como fuente de soluciones y por la entereza de sus pupilos como fuente de victorias.