La 'Houdini' del Aula entra en escena

Son muy pocas las jugadoras capaces de sacarse un conejo de la chistera o de dejar al público con la boca abierta con un imperceptible juego de manos. Silvia Arderius es una de ellas. Dueña de una varita mágica innata para el balonmano, la central madrileña entró en escena este martes para lucir los colores de su nueva camiseta: la del Aula Cultural. 

Aderius deja atrás 11 años en Alcobendas para embarcarse en lo que define como un " proyecto muy ilusionante" en "un club que le gusta a todos". El aura que desprende el Aula Cultural ha sido uno de los artífices de lo que se podría etiquetar como el fichaje estelar de la temporada. Sobre su nuevo escudo, Silvia Arderius se manifiesta en los siguientes términos: "Da la sensación de tener mucha ambición, de ir a más cada año. Yo sólo espero poderles ayudar a mejorar la temporada pasada y a quedar un poco más arriba este año", declara. 

La madrileña contaba con varias propuestas sobre la mesa. Todas ellas más sabrosas, en lo que a dígitos se refiere, que la del Aula Cultural. Sin embargo, la jugadora no se ha movido por ninguna brújula económica y ha optado más por abrazarse al proyecto deportivo que más la aportará a nivel profesional: "He contactado con algunos otros clubes, pero la oferta de aquí me gustaba más. No buscaba tanto la oferta económica. Económicamente en Alcobendas estaba bien y todo lo deportivo también, lo que pasa es que la parte profesional me ha decantado por el Aula, además de que el tipo de juego creo que me viene mejor este que otros", explica. 

Arderius, que trabajará como profesora en Arroyo de la Encomienda, gracias al acuerdo alcanzado por el club con el Fundación Escuna, afronta su primera aventura fuera de casa: "Yo quería salir y vivir esta experiencia desde hace unos cuantos años, lo que pasa es que no es fácil salir de un club como Alcobendas, donde estaba muy a gusto y lo tenía todo. Creo que este club es como Alcobendas hace unos años, con esa ambición y pienso que aquí puedo estar muy a gusto", concluye. 

La ilusión de Silvia es compartida en el seno del club, donde el presidente, Cayetano Cifuentes, y el entrenador, Miguel Ángel Peñas, explicaron la importancia de contar con la presencia de la internacional, que lucirá el dorsal 27 que deja huérfano su predecesora Alicia Fernández. "Los objetivos del club son seguir creciendo y con ella se podrá desarrollar mucho mejor", asegura Cayetano. 

Por su parte, Miguel Ángel Peñas, presume de nueva pupila: "Nunca podríamos pensar que una jugadora de esta categoría estuviera con nosotros. Tiene peculiaridades que no tiene ninguna otra central en España. Tiene una calidad extraordinaria y se va a adaptar rápidamente en nuestra forma de jugar", estima el técnico, que destaca el catálogo de posibilidades que ofrece el juego de la madrileña. Desde la creatividad hasta la velocidad, pasando por convertirse en una baza de oro en el ataque estático, talón de Aquiles del club vallisoletano. 

Aunque Silvia Arderius era la protagonista de la mañana, algunos temas no pudieron pasarse por alto durante la presentación de la central. Las palabras del presidente del Atlético Valladolid, Juan Carlos Sánchez-Valencia, y su petición de un pabellón en exclusividad como condición para su continuidad han levantado una nube de polvo en la que el Aula Cultural no ha querido meter la cabeza. 

Cayetano Cifuentes, presidente del club, explica que ya se ha mantenido una reunión con el concejal de deportes del Ayuntamiento, Alberto Bustos, para conocer los puntos del conflicto y las posibles vías de solución. El directivo asegura que el Aula Cultural "quiere jugar en Huerta del Rey y creemos que se puede conjugar los dos equipos. Nosotros estamos abiertos a fórmulas para entendernos", confiesa Cifuentes, que aboga por el buen entendimiento entre ambos clubes si fuera posible. 

El presidente entiende que "si alguien considera que no tenemos lugar en Huerta del Rey tendrá que demostrarlo" a la vez que estima que una buena sinergia entre Atlético y Aula sería beneficiosa para el balonmano de la ciudad y para ambos clubes, en particular. Por lo tanto, Cayetano Cifuentes cree que "el presidente actual, o el que esté, y nosotros estamos obligados a entendernos, porque tenemos bastantes cosas en común", concluye.