El BM Valladolid femenino, en plata avalado por el Club

En oro y en plata. Valladolid tiene quilates en el cofre del balonmano femenino para exportar. Con la presencia del Aula Cultural en la élite nacional, el suspense lo ponía el Aceitunas Olibher BM Valladolid, que tenía que escalar una montaña monetaria cercana a los 20.000 euros de altura para poner su nombre en uno de los grupos de la División de Honor B.

La difícil escalada no ha terminado, pero ha recibido una bombona de oxígeno desde el club presidido por Óscar Simón. El máximo responsable del Balonmano Valladolid ha lanzado un guiño a la sección femenina del club, portando la llave maestra que ha permitido abrir la puerta de la categoría de plata; división de la que ya forma parte el equipo dirigido por Rubén Carrasco, una vez formalizada su inscripción con el pago de 1.250 euros abonados a la Federación en concepto de la mitad del canon federativo y del  aval; el segundo pago tendrá lugar en diciembre. "Sin la ayuda del club, el equipo no hubiera salido", declara tajante Carrasco. 

La búsqueda de dinero para apilar esos casi 20.000 euros que conforman el presupuesto del Aceitunas Olibher seguirá corriendo por cuenta de los responsables del equipo que la pasada temporada logró el ascenso a Honor B. A día de hoy, 8.000 euros ya estarían asegurados, a falta de saber si se recibirá alguna subvención para el terreno de juego, una ayuda que oscilaría entre los 3.000 y los 4.000 euros, ayudas procedentes de organismos públicos y la llegada de algún otro patrocinador.

A partir de ese punto, los encargados de dirigir la sección femenina buscarán otros patrocinadores y otras vías para obtener ingresos como ya hicieran la pasada campaña. La idea inicial del encargado de la sección femenina, Rubén Carrasco, es que el equipo se autoabastezca, suponiendo un coste cero para el Balonmano Valladolid. 

Si todos los esfuerzos no fueran suficientes para completar los gastos que supone alimentar deportivamente al equipo, el club respaldaría económicamente a las chicas, aportando el dinero restante, una cuantía que en su máxima expresión alcanzaría los 3.000 euros, según la estimación de Rubén Carrasco. Así se lo ha hecho saber Óscar Simón al técnico vallisoletano: "Este club es de todos y las chicas forman parte del club", declara el presidente del Balonmano Valladolid una vez asegurada la presencia del equipo en plata, un apoyo que asegura ser firme desde el principio y extrapolable a todas las secciones del club. 

El Balonmano Valladolid se vestirá de plata la próxima campaña a todos los efectos. El grupo que consiguió el ascenso se mantendrá con tres o cuatro pinceladas en forma de refuerzos. El grueso del bloque será el encargado de empezar a preparar a finales de agosto el asalto a la permanencia, que comenzará el primer fin de semana de octubre.