El BM Arroyo se lleva el otro duelo vallisoletano en Boecillo
A un lado del parquet del polideportivo de Boecillo el Balonmano Delicias, la revelación del campeonato en la Segunda Nacional y que acumulaba una vuelta invicta en su propio feudo, lo que les hacía afrontar el derbi como segundos clasificados. Una posición por detrás se encontraba Balonmano Arroyo, que acudía a la visita sin margen para el error si quería apurar sus opciones de afrontar el tramo final de temporada con opciones de luchar por el título. Bajo estas premisas se abrió juego.
Desde los primeros lances del encuentro Balonmano Delicias demostró que su situación en la tabla distaba mucho de ser un farol y tomó escasas rentas a su favor, sustentada en la fiabilidad cara a portería de sus extremos. Arroyo, por su parte, aguantaba el envite tirando de casta más que de solvencia en el juego. Mediada la primera mitad, Balonmano Arroyo dio muestras de la ofuscación del jugador empedernido y Balonmano Delicias pagó esos errores en la circulación en ataque con varias acciones de contrataque que le dio una importante renta de hasta cinco goles en las postrimerías del primer período.
Los técnicos visitantes Jimmy Delgado y David González guardaron un as en la manga para solucionar la papeleta, y un doble pivote en ataque permitió desatascar la situación y frenar la sangría hasta el 14-11 favorable a BM Delicias, con el que se llegó al descanso.
En el segundo tiempo, la tendencia de los últimos minutos del anterior acto se mantuvo, y los visitantes comenzaron a recortar en el marcador hasta conseguir igualar el partido con el 18-18. Balonmano Arroyo encontró en Manolín un croupier de lujo para repartir juego en ataque, pero Delicias le dio sentida réplica con una pareja de ases en los dos laterales. Cuando los arroyanos amenazaron con dar la baza definitiva, Joaquín Velasco solicitó tiempo muerto para arengar a sus hombres y poner todas las cartas sobre la mesa.
A seis para el final, con ventaja de uno para BM Arroyo, todas las fichas estaban sobre la mesa. Pudo ganar cualquiera de los dos, pero quizá la mayor experiencia de los visitantes en los minutos finales del partido, unido al afán de remontar un partido que vieron perdido, hizo que por primera vez en toda la temporada, la banca perdiera en Boecillo. Los catorce de Jimmy Ocean se llevaron el botín de la cámara más inexpugnable de toda la Segunda Nacional.
El resultado deja muy abierto el desenlace de la competición de Segunda Nacional. Si bien el líder, Balonmano Valladolid, es el único equipo que a día de hoy depende de sí mismo, los dos equipos que se vieron las caras en este partido albergan posibilidades en caso de pinchazo del filial ASOBAL.