El Atlético Valladolid presenta a sus dos nuevos refuerzos
El Recoletas Atlético Valladolid ha presentado a sus dos últimos refuerzos de cara a la temporada 2018/19. Se tratan del pivote internacional argentino Gastón Mouriño y del extremo derecho Manu García. Ambos han posado para los medios gráficos con su nueva camiseta en el Polideportivo Huerta del Rey y han comparecido en rueda de prensa junto a su nuevo técnico, David Pisonero, y el presidente del club Mario Arranz.
Gastón Mouriño, de 23 años, 1,92 metros de altura y 100 kilos de peso, llega procedente del MMT Seguros Zamora para ocupar la posición de pivote y desempeñar tareas tanto ofensivas como defensivas. Tras agradecer al club “por esta gran oportunidad”, el argentino quiso explicar cuál puede ser su aportación para el equipo: “Ayudar mucho en defensa y ataque. El año pasado y el anterior en Zamora tuve mucho protagonismo en las dos áreas, y eso me da confianza para saber que puedo aportar en esas dos facetas”.
Mouriño aclaró que aún no conoce a sus compañeros, pero que no cree que eso vaya a ser un problema. “Poco a poco iré amoldándome a ellos y al tipo de defensa y juego del equipo”, afirmó el pivote. Por último, ante la posibilidad de perderse algún encuentro con el Recoletas Atlético Valladolid por sus posibles compromisos internacionales, el natural de Buenos Aires dejó claro que en principio no debería suponer ningún problema compaginar ambos conjuntos: “no me perderé ningún partido con el Recoletas Atlético Valladolid por ello. En octubre hay encuentros internacionales, pero hay parada de la Liga Asobal, y durante el Mundial también. Ojalá no tenga que parar y pueda estar con la selección, vestir la camiseta de Argentina es muy importante”.
El otro refuerzo, Manu García, de 21 años, 1,83 metros y 76 kilos de peso, procede del BM Villa de Aranda, club en el que se ha formado como jugador. A pesar de su juventud, el extremo tiene experiencia en Asobal, donde ya ha jugado tres temporadas. En su presentación el arandino se mostró muy ilusionado con su nueva etapa, la cual le permitirá enlazar estudios y deporte: “Es la primera vez que salgo de Aranda de Duero. Siempre quise jugar al balonmano y no fui a la universidad en su momento. Ahora tengo la posibilidad de continuar mis estudios en la universidad y seguir jugando al balonmano en Valladolid así que es una gran oportunidad”.
En cuanto a lo que podrá contribuir al equipo, el de Aranda se mostró confiado y con muchas ganas de empezar con la dinámica del equipo. “Vengo a aportar trabajo y mejora, y batirme los minutos que me dé el entrenador, en los que iré a muerte. Me veo un jugador sobrio, que da el máximo, aunque sé que debo mejorar en el aspecto físico. El trabajo y el esfuerzo son mis mejores características”, comentó García. El joven jugador no cree que la edad vaya a ser un problema a la hora de enfrentarse a rivales con mayor experiencia, y confía en su buen papel cada vez que salte al parqué: “es cierto que da respeto jugar con rivales veteranos y con mucha experiencia, pero ya lo hice en Aranda, incluso cuando estuve solo cuando mi compañero se lesionó. No será fácil porque el nivel es alto pero hay que ir de cabeza y de frente”.
Por su parte, Mario Arranz, presidente del Recoletas Atlético Valladolid, dio la bienvenida a ambos jugadores al club y quiso valorar sus incorporaciones. “Son jóvenes con posibilidades de dar un paso adelante y de hacerse más importantes en el club. Son jugadores con experiencia a pesar de su corta edad”. El máximo mandatario del club pucelano aseguró que tanto Gastón como Manu forman parte del objetivo de rejuvenecer la plantilla. “Ambos vienen a confirmar la idea que este año queríamos rejuvenecer la plantilla, la mayoría son de la generación de los 90, y la media de edad del equipo ha bajado 28 a 24 años”, explicó Arranz.
También quiso entrar a valorar ambos fichajes el que será su nuevo entrenador. “Son dos incorporaciones de nuestro perfil, jóvenes con mucho potencial, que vienen a compensar la plantilla. Es lo que pretendíamos a principio de temporada”, concluyó el técnico.