Óscar Simón (izq.) y Marcos Fernández durante la rueda de prensa. FOTO: V.D.
Óscar Simón (izq.) y Marcos Fernández durante la rueda de prensa. FOTO: V.D.
Óscar Simón (izq.) y Marcos Fernández durante la rueda de prensa. FOTO: V.D.
 |  Cuatro Rayas Valladolid

Continúa el culebrón cubano

29 de Noviembre de 2013
Escrito por
Guillermo Sanz
Guillermo Corzo se perdió en el desierto mientras en Valladolid se perdía a un jugador una semana en un momento crucial de la temporada. El viaje del cubano a Catar siguió un guión frenético, a la altura del camarote de los hermanos Marx. 


Recapitulando episodios, el club recibe el interés de El Jaish por hacerse con los servicios del lateral cubano. El Balonmano Valladolid acepta que Corzo viaje hasta el lejano oriente para convencer al conjunto catarí y cerrar una operación "que suponía un beneficio para el club", como estima el presidente de la entidad amarilla, Óscar Simón, que compareció en rueda de prensa junto al representante del jugador, Marcos Fernández para explicar el caso. 


Una vez en territorio catarí, Guillermo Corzo entrena con el equipo. Su juego parece convencer al general, encargado de cerrar las operaciones dentro del club oriental, y del propio entrenador. "El entrenador da el OK. De hecho, un día antes del último entrenamiento me pregunta que si está ya fichado. Yo le veía contento", relata Marcos Fernández. Todo parecía ir viento en popa hasta que el general se ausenta de la ciudad catarí. Es entonces cuando el técnico de El Jaish advierte de que Corzo tiene problemas en la rodilla, frenando la operación. 


En un país en el que los jugadores se mueven casi lo mismo que el dinero, "los contratos se pueden romper en cualquier momento". Así, lo firmado se quedó en papel mojado. El representante del jugador gastó su última bala alargando su estancia en Catar un día más. "Si había alguna posibilidad de que se cerrara era quedándose el lunes", asegura Marcos Fernández. 


El tiempo se acabó y Corzo cogió el vuelo de vuelta a España para reincorporarse a la disciplina vallisoletana y comenzar a preparar el partido del sábado ante el Cuenca. La operación que dejaría en las arcas vallisoletanas "una cantidad de dinero superior a la recibida por Sierra", como explica Óscar Simón, se queda en estado de stand by. Sin embargo, este revés no escribe el fin en el cuento de las Mil y una noches de Corzo. 

El tren a Catar se ha escapado, pero puede pasar otro. El general tiene la última palabra y si el jugador "ficha es porque el general dice que sí, no porque el entrenador lo diga", asegura el representante de jugadores. Hasta que llega ese día, si es que llega, el jugador seguirá jugando a las órdenes de Nacho González: "Hasta que no esté el dinero en la cuenta corriente del club, no se moverá de aquí", asegura Marcos Fernández. Si esa oferta final llegara antes del martes, el jugador no dejaría todo para acudir a la llamada del El Jaish, lo haría siempre después del partido del próximo martes ante el Villa de Aranda: "Lo único que voy a  mirar es por el bien del club. Aunque hoy me lleguen y me digan que pagan ese dinero o más, yo aseguro que estará en Aranda", promete el representante. Después, el jugador enfilaría la puerta de salida, sin cerrarla, ya que su hueco lo ocuparía de manera inmediata Pesic, que está a la espera de la resolución del culebrón Corzo para ocupar la taquilla que quedaría libre.