Cutura, en el partido de liga ante los gallegos de esta temporada. FOTO Photogenic
Cutura, en el partido de liga ante los gallegos de esta temporada. FOTO Photogenic
Cutura, en el partido de liga ante los gallegos de esta temporada. FOTO Photogenic
 |  Amistoso

30-31: El "Baby Cuatro Rayas" evita el naufragio en Vigo

20 de Enero de 2012
Escrito por
Guillermo Sanz

El puerto de As Travesas estuvo cerca de ver cómo la nave del Cuatro Rayas encallaba en la costa gallega. La embarcación vallisoletana llegó a Vigo escaso de fuel. Sin Gurbindo, Sierra, Joli y Nikcevic (repartiendo juego con sus respectivas selecciones) y sin Perales ni Alexis (que se quedaron en tierra por motivos médicos), al capitán Pastor le tocó formar una tripulación de grumetes. Los jugadores del UEMC-Balonmano Valladolid, César Pérez, Raúl Álvarez, Félix García y Nicolás López, se unieron a la expedición amarilla para ayudar a completar un itinerario que sirvió para que los menos habituales sumaran horas de navegación.

En el camino, la nave amarilla, por las circunstancias más cercana a “La Dorada” de Chanquete que al “Titanic”, se encontró en su camino con in iceberg, en otros momentos un cubito de hielo, de nombre Academia Octavio Pilotes. Los gallegos buscaron en la mermada plantilla vallisoletana una dosis de moral para encarar la segunda vuelta de una Liga en la que han llegado al ecuador con muy buenas sensaciones. Con un juego más físico, los hombres de Enrique Domíguez comenzaron ganándole la partida al equipo de Pastor desde el primer minuto; logrando una ventaja máxima de seis goles (18-12) a cinco minutos de cerrar el telón a la primera parte. Sin embargo, el arreón final de los pucelanos redujo la distancia en el marcador hasta los cuatro goles: 20-16. Turno para cambiar la hoja de ruta en el camarote de Pastor.

En la segunda parte el guión no cambió. Los vigueses continuaron poniendo a prueba a un “baby Cuatro Rayas” que había madurado durante el primer periodo y, en 15 minutos, borraron la igualdad del luminoso, poniendo un poco de pimienta a un partido sin sabor. Los gallegos tiraron su ventaja por la borda. Un encuentro nuevo había comenzado y los vallisoletanos no quisieron comenzar la pretemporada invernal con una derrota. Tiempo para sacar a relucir los galones y demostrar, pese a las bajas, qué escudo tiene más abolengo dentro de la Asobal. Tras ocho minutos de intercambio de golpes, el equipo amarillo asestó el último puñetazo, adelantándose por primera vez cuando más importaba.

El primer amistoso del tour invernal del Balonmano Valladolid se aprobó con un 30-31, o lo que es lo mismo, con un cinco “pelao”, pero con muchas notas positivas que Pastor anotará en su cuaderno de bitácora. El miércoles 25 la nave pucelana llegará a su próximo puerto, en Aranda de Duero, donde la tripulación espera que se viva un desembarco mucho menos sufrido.