24-21: Jueves de dolor
El Aula Valladolid no pudo regresar este jueves de tierras catalanas con los dos puntos en su equipaje después de caer ante el KH7 Granollers por 24 a 21 en un duelo donde las locales se aprovecharon de su gran intensidad defensiva y de la soberbia actuación de su guardameta para llevarse la victoria ante el conjunto vallisoletano. Un partido que el equipo local dominó casi por completo salvo en los primeros minutos en los cuales el Aula Valladolid llevó la iniciativa tanto en el juego como el marcador. Un encuentro disputado en fechas y circunstancias muy especiales que hicieron que al Aula Valladolid le resultara muy difícil mantener la concentración. Pese a ello, el equipo vallisoletano tuvo opciones de llevarse los puntos ante un conjunto catalán que ha sido uno de los que más y mejor se ha reforzado en esta segunda vuelta del campeonato.
Y eso que el partido comenzó bien para los intereses del equipo dirigido por Miguel Ángel Peñas que con los goles de Ana Viloria y Silvia Arderius tomaba las primeras ventajas en el electrónico. Sin embargo, el Granollers reaccionó pronto y a los seis minutos se ponía por delante. Era su primera diferencia a favor y ya nunca dejó escapar el dominio en el luminoso. Un parcial de 4-0 en un abrir y cerrar de ojos hacía que el cuadro local se encontrase cómodo sobre la pista y el Aula, por el contrario, no acaba de encontrar su sitio en el parqué.
Pese a que dos goles de María Prieto O’Mullony, máxima anotadora del equipo vallisoletano con seis tantos en su casillero, situaban a las vallisoletanas a sólo un gol de distancia hasta en dos ocasiones, otro parcial de 3-0 provocaba que las locales volvieran a irse en el marcador. Cuatro goles arriba para el Granollers que se iban a reducir a tres en el descanso. Un parcial final de 1-3 daba esperanzas para el Aula Valladolid que iba a ver cómo, tras el paso por vestuarios, las locales volvía a endosar otro parcial importante de 5-0 para marcharse definitivamente en el partido. La ventaja local ascendía hasta los ocho tantos.
El Aula no tiraba la toalla y a continuación lograba otro 1-5 para volver a meterse en el duelo. Un gol de O’Mullony volvía a poner a las de Peñas a cuatro goles de las vallesanas pero a partir de ese instante el partido se volvió loco con goles para los dos equipos que provocaba que la distancia no se redujese un poco más. El esfuerzo visitante logró que el Aula se pusiera a sólo tres goles después de remar mucho, pero las vallisoletanas se ahogaron en la orilla y no pudieron reducir más la ventaja. De hecho, los tres goles de distancia fueron los que finalmente reflejaron el marcador final.
24 a 21 para un Granollers que mantiene su progresión desde la llegada de nuevas e importantes jugadoras y que supo jugar sus cartas en este encuentro aplazado de manera algo polémica hace algo más de un mes. La mala suerte en la finalización y la grandísima actuación local en portería fueron al final determinantes para que las vallesanas se llevaran los dos puntos en juego. De hecho las visitantes llegaron a fallar hasta tres penaltis, algo que pudo cambiar el guión del encuentro. Además la interpretación del pasivo por parte de los colegiados andaluces perjudicó y mucho a un Aula que vio como además las locales aplicaron una contundente defensa por el centro durante todo el partido sin que apenas hubiera consecuencias en forma de exclusiones. Factores que decantaron la balanza a favor del cuadro catalán.