"No puedo"

Fue el martes a las 16 de la tarde cuando el CB Valladolid se percató de que algo no iba bien: Luther Head no se presentó en el CED para tomar el autobús camino de Madrid y, a partir de ahí, la directiva vallisoletana removió cielo y tierra para dar con él. El agente español fue el único con quien pudieron contactar hasta que, este jueves por la mañana, el jugador hizo acto de presencia en el club. El personal administrativo de oficina rápidamente llamó a Felipe Martín, quien se personó en el lugar para hablar con Head. Quedaron en volver a encontrarse por la tarde.

Pero, tras esa nueva reunión, las posiciones no se han acercado: el base americano sólo declaró que no podía acudir al partido contra el Madrid, sin dar más explicaciones, mientras que el club mantiene la postura de cursar un expediente disciplinario, rescindir el contrato y, según el código de régimen interno, exigir una compensación por los días en que Luther Head se ha ausentado de su puesto de trabajo. Desde el CB Valladolid manifiestan su deseo de finiquitar este asunto lo antes posible, aunque temen que la vía burocrática alargue el proceso.

El hecho de que el jugador no haya dado ninguna explicación no hace sino aumentar las suspicacias de que hay un equipo detrás de Head, aspecto que no justifica la actitud del jugador, ya que tenía una cláusula de salida en su contrato. Lo que está claro es que Luther Head no vestirá la casaca morada porque la dirección deportiva vallisoletana tiene claro que no hay marcha atrás y van a rescindir el acuerdo en base al reglamento de régimen interno del club.