Fisac: “No sé hasta dónde llegará mi paciencia”

Continúa la incertidumbre por las oficinas de Pisuerga y es Porfi Fisac quien está lanzando los mensajes más preocupantes. Como líder y cabeza visible de un proyecto deportivo ilusionante, el técnico de MyWigo Valladolid es voz autorizada y sus declaraciones nunca contemplan la banalidad: “La paciencia del grupo llegará hasta el final; la mía, no lo sé”, declaraba este martes, para añadir que “tengo unas condiciones personales que no sé hasta dónde me permitirán llegar”. Y es que Porfi también ha apuntado a las dificultades económicas del club: “Los viajes y lo ajustado de la plantilla lo tenía claro. Que no cobráramos bien era algo que no asumía”, explicaba el entrenador morado.

El otro gran tema de la mañana era Román Montañez. Lesionado en su pie izquierdo con una distensión del ligamento peroneo astragaliano anterior, con rotura capsular en la inserción posterior, el esolta catalán debería estar de baja un período no inferior a dos semanas pero, como ha reconocido Porfi, “tenemos un cuerpo médico que esla Virgen de Fátima. Montañez es imprescindible para ganar, de ahí que lo estemos forzando para que llegue el domingo”. Y es que, pese a que el jugador no estaba especialmente acertado en los últimos encuentros, para Fisac su sola presencia es definitiva: “Él es el que genera ese miedo al contrario. La estructura táctica para finales de partido es con Román en pista”, sentenciaba. Esta baja no va a hacer que el club se mueva en el mercado de fichajes, ni siquiera en cuanto al hombre alto: “De momento nada, ni Moncasi. Hasta que no solucionemos algunos temas económicos, no hay nada”, zanjaba Porfi.

Junto al entrenador, compareció en rueda de prensa Jonathan Arranz. El base, procedente de la cantera, se mostró muy satisfecho por el inicio de campaña del equipo y, personalmente, declaró que “estoy jugando 5-10 minutos y estoy intentando aprovecharlo. Me están ayudando mucho y tengo el apoyo de todos, tanto de Porfi y el cuerpo técnico como de los compañeros”. Eso sí, en el primer equipo tiene un rol más secundario, aunque él mismo reconoce que “estoy ganándome algún minutillo más”, algo que ya tiene asumido en el filial: “En EBA es diferente, tengo más responsabilidad y debo dar un pasito adelante”, explicaba el canterano.