Casas pasa revista

En el marco de la presentación de la campaña de abonados, de la cual opina que es “excelente y muy creativa”, Ricard Casas aprovechó para dar un vistazo a la actualidad deportiva del CB Valladolid, especialmente en lo referido a la confección de la plantilla. “Estoy muy contento con el trabajo realizado con Felipe (Martín), sobre todo por la velocidad a la que hemos tenido que hacer las cosas”, aclara el catalán. Tras la confirmación del fichaje de Omari Johnson, de quien Casas destaca su “atletismo y físico”, ya sólo queda por incorporar a un jugador: “Nos falta un alero de perfil anotador, pero que pueda generar que los compañeros puedan tirar”. También ha resaltado el nivel del equipo teniendo en cuenta las dificultades económicas de la entidad vallisoletana. “Hemos roto la fórmula dinero-calidad. Vamos a tener mucho nivel gracias a la creatividad que hemos desarrollado para buscar la calidad”, finaliza el técnico morado.

La preparación en pista va por buen camino pero la necesidad de medir fuerzas en situaciones reales de partido hace muy necesaria la búsqueda de amistosos de pretemporada. Este martes estaba planificado uno en Bilbao, que finalmente no va a disputarse. “Se ha anulado por la situación global que tenemos los dos equipos. Nosotros perdemos a Head, que está en la presentación de la ACB y ellos tienen a dos internacionales que acaban de llegar del Eurobasket. Era un acuerdo amistoso y, como tal, no ha habido conflicto al anularlo”, sentencia Casas. Eso sí, ya están confirmados los encuentros en Palencia el día 7 de octubre y en Vitoria el 9, antes los equipos de dichas localidades.

Al no haber habido presentación de ningún jugador ni miembro del cuerpo técnico, Ricard Casas fue preguntado por la figura de Antonio Pérez, segundo entrenador. “Es una gran persona y un técnico muy inteligente, que ha estudiado INEF y Psicología y que maneja muy bien el inglés”. Su designación levantó cierta polémica, procedente de algunos medios de comunicación, al no haber sido elegido un entrenador de Valladolid. “Me supo mal todo esto porque yo sólo pedí al club que tenía que venir una persona para ayudarme, ya que necesitaba que fuera de muy alto nivel y que me conociera, con el fin de acelerar la velocidad con que teníamos que hacer las cosas. El club aceptó mi petición y esa es toda la historia. Es justo de mi parte decir que he sido yo el que ha exigido, en el buen sentido de la palabra, esta circunstancia”, aclara Casas.