Casas, el metrónomo

Un metrónomo es un aparato o dispositivo que se utiliza para marcar el tiempo o el ritmo de las composiciones musicales. En este CB Valladolid, Ricard Casas es su metrónomo. Porque representa la justa medida entre el optimismo y la realidad: “Ganar te refuerza y da positividad, aunque hay aspectos básicos que tenemos que seguir mejorando”. Por tanto, de sus palabras se desprende la idea de que el equipo está en buena línea y que la victoria del pasado sábado no ha de impedir que se siga trabajando con la misma disposición.

La imagen ofrecida en Pisuerga será una tónica habitual para Ricard Casas, quien reconocía que “nosotros tenemos que disponernos al máximo esfuerzo posible, especialmente cuando juguemos en casa”. Preguntado sobre si habrá diferencias en el equipo según jueguen como locales o no, el técnico catalán se mostraba sincero: “No lo sé. Cuanto menos nos lo planteemos, mejor”. El ambiente, pese a que en el pabellón había menos de 2.000 personas, fue muy bueno para el desarrollo del partido. “Sentí mucho ánimo por parte de la gente. Empezamos con un número determinado de público pero acabaremos con más, seguro”, afirmaba confiado el entrenador.

El próximo sábado, frente a Valencia Basket, la plantilla morada tiene un nuevo chance de seguir mejorando. Enfrente, un conjunto que tiene de todo: “Es un rival de nivel, intenso y donde la anotación procede de todas las posiciones. La clave está en poder controlar todo su talento técnico y táctico”, analizaba Casas. Para ese encuentro, el CB Valladolid no podrá contar con el ansiado base. La no llegada de Will Solomon no ha supuesto un contratiempo muy grande para el cuerpo técnico vallisoletano, quien tiene claro lo que necesita: “Si no hay disponibilidad clara del jugador, no nos sirve”, sentencia Ricard Casas.