Fede Van Lacke, estelar en el Madrid Arena.
Fede Van Lacke, estelar en el Madrid Arena.
Fede Van Lacke, estelar en el Madrid Arena.
Baloncesto

89-86: Un triple de Lofton en el último segundo de la prórroga tumba al Blancos de Rueda

Un triple de Lofton en el último segundo de la prórroga decidió un partido con dos vencedores que enfila y deja el camino expedito al Estudiantes en la pelea por la octava plaza de la clasificación. Los de Casimiro ganan el average particular y arrebatan al Blancos de Rueda la octava posición.


El equipo de Fisac cuajó una extraordinaria primera parte, en la que obtuvo un premio escaso para los méritos adquiridos, pero sucumbió en la reanudación castigado por la falta de frescura de jugadores franquicia como Battle o Van Lacke, tan inconmensurable como falto de oxígeno en el Madrid Arena. El escolta argentino se fue hasta los 28 puntos, 33 de valoración, pero su exhibición se quedó huérfana. La escasa efectividad de la rotación visitante acabó dando alas al conjunto estudiantil, cuya amplitud de banquillo en posiciones interiores marcó diferencias. Su rebote ofensivo le mantuvo en partido en la primera parte cuando más llovía en su contra (18-27, minuto 12), y esa misma faceta volteó el partido en la reanudación.


Pese a su escasa rotación y los múltiples problemas que encontró para anotar en la segunda parte, Blancos de Rueda llegó a disfrutar de una posesión para ganar en un error clamoroso de los locales. El palmeo de Battle a la entrada de Van Lacke devolvió la igualdad al marcador (77-77) y el posterior saque largo de Oliver se perdió por la línea de fondo del campo contrario con apenas cuatro segundos por jugarse. Un tiro desequilibrado de Van Lacke desde 5 metros acabó con las esperanzas de los vallisoletanos.


En la prórroga se impuso lo que pareció apuntar la lógica. Sin Barnes ni Battle, eliminados por faltas, Estudiantes se apoderó de la 'pintura' y castigó una y otra vez a su rival en el rebote ofensivo. Casimiro sacó partido con Suárez y, principalmente, Jasen del desajuste en el poste bajo y el equipo madrileño pasó a dominar el ritmo de partido (84-80, a 1.29). Un último esfuerzo devolvió la igualdad al marcador tras un robo de Dumas en media pista (86-86) con 17 segundos por disputarse. El triple imposible de Lofton con una mano de Isaac López en su cara decantó la balanza.


Extradordinario primer tiempo


Blancos de Rueda ofreció su mejor cara en la primera parte, apoyado en un estelar Van Lacke que rozó la perfección, tanto en ataque con dos únicos tiros fallados y 5/6 en triples como en defensa, bailando con la más fea, primero con Carlos Suárez y luego con Lofton. El primer cuarto, para enmarcar, comenzó a ritmo de vértigo para los vallisoletanos, muy activos en defensa y con las ideas muy claras en ataque. 


Sorprendido por la salida de su rival, Asefa Estudiantes tardó prácticamente trece minutos en asentar su juego y hacer valer su principal virtud, el rebote. Precisamente sus capturas en situaciones de ataque le mantuvieron en partido durante muchas fases, gracias a la actividad bajo tableros de Suárez, Jasen, Gabriel y Caner-Medley. A pesar de ello y de la escasa efectividad de la rotación visitante -aspecto que terminó por decantar el partido-, Blancos de Rueda no perdió nunca la cara al partido.


Después de alcanzar la máxima ventaja (18-27, minuto 12), Estudiantes despertó y logró neutralizar la fluidez ofensiva de un rival que debió recurrir durante muchas fases a una defensa zonal 2-3 para proteger a sus jugadores franquicia -Van Lacke y Battle apenas tuvieron-.


FICHA TÉCNICA:


89.- Asefa Estudiantes: Oliver (11), Lofton (11), Carlos Suárez (17), Caner Medley (8), Popovic (6) -cinco inicial-, Granger (2), Jasen (17), Gabriel (17) y Clark.


86.- Blancos de Rueda: Dumas (2), Van Lacke (8), Diego García (13), Battle (12) y Barnes (13) -cinco inicial-, Isaac López (4), Báez (11), Baldo y Chase (3).


Árbitros: Pérez Pizarro, Santi Fernández y Zafra. Eliminaron a Barnes y Battle.


Parciales: 16-24, 23-18, 18-17 y 20-18 (final), y 12-9 (prórroga).


Incidencias: 9.500 espectadores en el Madrid Arena, con una nutrida representación de aficionados vallisoletanos. El partido comenzó con quince minutos de retraso por una avería en los marcadores de 24 segundos.


Tiempo muerto para el recuerdo


Faltaban 13 segundos para que concluyera el tiempo reglementario, cuando los jugadores acuden al tiempo muerto de Fisac. El marcador refleja igualdad, 75-75, y el balón correponde al Estudiantes en saque de banda. Un buen número de técnicos, entre ellos Luis Casimiro, hubiera optado por cometer falta para disfrutar de la última posesión. Fisac no. El técnico segoviano se dirige a sus jugadores y, mirándoles a la cara, inquiere: "Hay que defenderla, ¿estáis de acuerdo? Si creéis en ello, la defendemos".


Una imagen impagable de la que pudieron disfrutar todos los amantes al baloncesto que siguieron el partido por televisión, y que viene a reforzar lo oportuno de la presencia de las cámaras en los tiempos muertos pese a la oposición del propio Fisac. El cara a cara con su plantilla resultó toda una lección sobresaliente para futuros entrenadores, además de suponer un gancho necesario para captar la atención de más aficionados. Todo un clinic en apenas quince segundos. Lo dicho, impagable.