79-66: Llegó la primera victoria vallisoletana
El partido tuvo inicio propio de pretemporada. Numerosas pérdidas de balones, continuos correcalles y un descontrol que no beneficiaba ni a unos ni a otros, lo que logicamente desesperó a los dos entrenadores, Fisac y Casimiro.
Unos primeros veinte minutos donde primero mandó el conjunto madrileño, luego reaccionaron los locales -que al término del primer cuarto ganaban 17-11-. Una diferencia que aumentó hasta un contundente 27-11 en el ecuador del segundo periodo, y que apenas duró un suspiro. Un parcial, esta vez del Asefa Estudiantes, de 3-19 provocó el empate a 30 y luego hizo que incluso los madrileños volvieran a ponerse por delante en el marcador antes del descanso.
El vestuario sirvió a Fisac para poner orden, y el partido entró en el segundo periodo en un formato más logico, donde las defensas y los ataques actuaban con más criterio. Y mientras el Blancos de Rueda mantuvo esa buena dinámica hasta el final, el cuadro madrileño desapareció en los últimos diez minutos para poner en bandeja la primera victoria de la temporada a los locales.
Mención especial a la dirección de Dumas, a los puntos de Robison y la intensidad de Slaughter. Curiosamente estos dos últimos habían sido duda hasta el último momento por problemas físicos. Más discreto estuvo una vez más Van Lacke, aunque su entrenador ya se encargó después en ruedad de prensa la importancia de su trabajo defensivo. Y es que, entre todos, consiguieron la primera victoria local de esta temporada.
FICHA TÉCNICA:
79.- BLANCOS DE RUEDA (17+18+28+16): Van Lacke (3), Baez (16), Dumas (13), Robinson (21), Slaughter (12) -cinco inicial-, García (8), López (-), Martín (3), Barnes (3) y Stanic (-).
66.- ASEFA ESTUDIANTES (11+27+18+10): Oliver (4), Ellis (-), Asselin (-), Welsch (9), Clark (15) -cinco inicial-, Granger (15), Gabriel (8), Jasen (11) y Sánchez (8).
Arbitros: Hierrezuelo, Araña y Sáncez. Eliminados por cinco personales los jugadores de Estudiantes Oliver y Asselin.
Incidencias: Segunda jornada de la Liga ACB. Pabellón Pisuerga, ante unos 4.200 espectadores.
