Ni la lluvia frena a la Valladolid más solidaria

Valladolid es solidaria llueva o haga sol. Eso es lo que demostraron los más de mil corredores que esta mañana no han dudado en recorrer la Acera Recoletos y el Campo Grande por una buena causa, luchar contra el cáncer infantil. A pesar de que la mañana amaneció lluviosa, no restó un ápice de participación para aquellos que se enfundaron la camiseta de la solidaridad y corrieron a beneficio de la II beca Paula Estévez para el estudio de la leucemia linfoblástica aguda, la misma que padeció la modelo Sandra Ibarra y la niña protagonista de la carrera.

Ambas estaban presentes, junto a la madrina, Mayte Martínez, y los padres de Paula, que ya organizaron el año pasado esta iniciativa en Cigales pero que en esta ocasión no cabían en sí de gozo de ver cómo iban llegando cada vez más corredores a pesar del mal tiempo. "No sólo ellos, también los 46 voluntarios que llevan montando todo esto desde las siete de la mañana", añadía Jorge Estévez, padre de Paula, con el dorsal número 1. "He visto a la gente muy volcada, todos apoyan esta propuesta porque saben que el cáncer infantil nos toca a todos un poco, a mí de forma muy directa, en casa, pero todos son conscientes de que hay que apoyarlo para que llegue un día en el que el tratamiento sea menos agresivo y los niños puedan llevar una vida casi normal", explicaba el verdadero motivo de toda esta organización.

Lo mismo pensaba Sandra Ibarra, quien se mostraba sorprendida de que la gente estuviera entrenado con la lluvia tan pronto. "Al mal tiempo, buena cara, seguro que a las once no llueve", decía minutos antes de dar comienzo a la carrera.

La niña, todavía ajena a que esta es "su" carrera, esta "contentísima" de ser el centro de atención, decía su padre. La pequeña cortó la cinta, igual que Mayte Martínez, que no paró de animar a los corredores durante el recorrido y hacerse fotos con quien se lo pedía. "Lo importante es participar, aquí nadie gana ni pierde, yo no iba a correr pero no dudé en colaborar con mi presencia, lo importante es estar aquí, como toda esta gente", afirmaba.

Desde todos los rincones

Éste fue el caso de tres amigos, Álvaro, Elvira y Juanjo, que no dudaron en viajar desde Palencia. "Venimos porque es una carrera asequible, apenas llevamos dos meses aficionados a correr, pero en esta ocasión, era por una buena causa", decían mientras se preparaban al lado del coche. Lo mismo pensaba el exjugador del Balonmano Valladolid, Victor Hugo, quien reconocía que le había convencido el fisio que le está ayudando con su recuperación. "Hay que echar una mano a los niños y apoyar este tipo de iniciativas, el mal tiempo puede fastidiar un poco, pero las razones de la carrera son más importantes", añadía mientras recogía su dorsal 305.

Otras personalidades como el popular Alberto Gutiérrez Alberca, quien decía al terminar "esta vez por lo menos la he acabado", el alcalde, el concejal de deportes, representantes de las firmas comerciales, se mezclaban con muchas personas anónimas, como las hermanas Gema y Pilar, que venían con idea de no correr, pero se animaron al ver el ambiente. "Nos parece una iniciativa muy buena, los niños querían correr y por eso hemos venido, aunque a nosotras no nos gusta y nos ha costado, pero ahora nos sentimos muy bien", decían al recoger su botellín de agua al acabar. O Laura, que junto a sus padres y sus hijos, animaba en la salida a su marido.

Los niños fueron otros de los protagonistas, ya que la organización calcula que unos 500 pequeños han participado. "Son kilómetros contra el cáncer y lo importante es conseguir una buena recaudación porque en investigación las cifras tienen que ser altas", explicaba Sandra Ibarra, mientras coincidía con Mayte Martínez en que tambien es primordial consolidar este proyecto.

La familia de Paula pidió ayuda a la Fundación Sandra Ibarra cuando trasladaron a la niña al Hospital Niño Jesús de Madrid y mejoró mucho. "Después se nos ocurrió lo de la carrera, porque Justino Asenjo (del CD Sprint Sport, organizador de la prueba) es cuñado del padre de Paula, y ahora es un sueño hecho realidad", concluye la modelo al ver a tanta gente soldiaria participando. Todos pueden sentirse orgullosos de haber contribuido a los 6.500 euros de recaudación.