Ilusionante debut

"Nunca había visto las gradas con tanta gente". Esa frase fue dicha por una autoridad regional al entrar en las pistas de atletismo de Renedo. Y es que a pesar de las horas -hasta bien entrada la noche-, y el día -un miércoles laborable-, numeroso público se acercó hasta el recinto deportivo para ver la competición. Cierto es que muchos eran familiares de los protagonistas, pero es que la presencia de muchas escuelas de atletismo de Valladolid y otras provincias fue uno de los grandes aciertos de la primera edición.

Así, desde el primer momento, atletas de todas las edades mostraron su valía en este deporte. Desde los prebenjamines que lo dieron todo en el hectómetro liso a los juveniles, que ya piden paso en la elite, la competición se fue desarrollando con puntualidad inglesa y sin ninguna incidencia negativa.

De esta forma se llegó al momento estrella de la reunión, con las pruebas reinas de los 800 y los 1.500 metros. En la distancia 'corta' la numerosa de atletas obligó a la organización a dividir la prueba masculina en dos series. Víctor Corrales ganó la primera tanda, con un tiempo de 1'50"40 mientras que Alvaro de Arriba se impuso en la segunda carrera, con un crono de 1'52"90.

En cuanto a la competición femenina, el Club Valencia Terra y Mar copó el podio con victoria de Elian Periz (2'05"80), por delante de sus compañeras Elena García (2'07"00) y Esther Desviat (2'07"20). No hubo carrera femenina en los 1.500 metros, pero sí masculina que se llevó de principio a fin José Fernando Díez, del Becantil (3'53"34), siendo segundo Francisco España (3'54"42) y tercero Iván Canovas (3'54"74).

Pero la competición todavía tenía guardadas dos sorpresas más. Primero con una milla popular inclusiva, donde se pudo ver "dando todo lo que tenían dentro", al entrenador del Blancos de Rueda, Roberto González, o el técnico del filial del Real Valladolid, Javier Torres Gómez, quienes no pudieron evitar ser doblados por aquellos atletas que fueron grandes en otras èpocas y que todavían tienen kilómetros en sus piernas.

Y mucho más emotiva fue la carrera de homenaje a Alfredo Lahuerta, mítico ex atleta, que fue homenajeado con una carrera donde se pudo ver a corredores de la talla de Isaac Viciosa. Una prueba en la que no hubo vencedores ni vencidos.