Plaza Mayor de Valladolid
Plaza Mayor de Valladolid
Plaza Mayor de Valladolid
San Pablo
Con Paco, del restaurante La Criolla.
Con los exjugadores del Balonmano Valladolid en Huerta del Rey
2 | Turismo y Deporte

Raúl González repasa lo imprescindible de Valladolid

Raúl González | Valladolid
26 de Septiembre de 2011
Imagen de sgarcia
Escrito por
Sara García

Aunque hace algunos años cambió su residencia habitual por Ciudad Real y ahora por Madrid, el segundo entrenador del Club de Balonmano Atlético de Madrid, Raúl González Gutiérrez, siempre será un vallisoletano blanquivioleta, el único del que su camiseta cuelga en el techo del pabellón con el número 14 del Balonmano Valladolid.

Él lo siente así y se decara “orgulloso de ser vallisoletano” y se ha erigido personalmente en “embajador” cuando está fuera de su ciudad. “Me gustaría promocionar Valladolid porque es una ciudad maravillosa y en continua evolución". Y añade:

“Es una ciudad que ha conseguido modernizarse pero conservando el sentido más tradicional de la ciudad”.


Además, añade que “sin llegar a ser una de las grandes capitales en cuanto a población se refiere, Valladolid tiene una gran variedad de espectáculos culturales, deportivos y gastronómicos que solo están al alcance de capitales como Madrid o Barcelona”.

De hecho, aunque reconoce que una de las grandes referencias de Valladolid es la fachada de la iglesia de San Pablo, a él le gusta pasear por la Plaza Mayor y sus alrededores y “contemplar todos los edificios, iglesias, y demás monumentos situados en el casco histórico antiguo”.

Le gusta esta zona porque además, paseando por las calles aledañas a la Plaza Mayor, se encuentra una de las zonas de bares y “maravillosas tapas" de la ciudad. Raúl González no duda en realizar sus recomendaciones respecto a restaurantes. Para tapear, él recomienza el Jero y la Mina, “donde se combinan las tapas y raciones más tradicionales con las últimas tendencias en gastronomía”.

Si tenemos un poco más de tiempo es de visita obligatoria el famoso restaurante La Criolla, regentado por uno de los grandes cocineros a nivel internacional. “Paco, además de un gran cocinero y buen amigo, está estrechamente ligado al deporte. Es muy conocido entre los deportistas ya que habitualmente es el elegido para acudir a las citas olímpicas como responsable de los caterings tanto de deportistas como de las distintas personalidades que acuden a estas citas”, explica. El deportista confiesa su plato preferido:

“mollejitas de lechazo y, por supuesto, acompañado con un Ribera de Duero.


Sin embargo, a pesar de todo esto, si Raúl tiene que dar un consejo a un turista de algo que no puede perderse, no duda en responder que la mejor visita a Valladolid es en Semana Santa, para él “el momento más mágico de la ciudad”. Valladolid cuenta con muchos espacios que los viajeros pueden descubrir. “Pero hay un momento del año donde Valladolid saca todo su potencial y se convierte en algo más que una ciudad: la Semana Santa, para ver las procesiones con sus magníficas tallas. La tradición, seriedad y la devoción de todos los participantes que abarrotan las calles pacientemente durante horas para admirar un acontecimiento único en España”.

Declarada de Interés Turístico Internacional, la Semana Santa es en Castilla y León una de las manifestaciones culturales y populares de mayor atractivo turístico. Las guías de turismo de la Junta tratan de describir ese “momento mágico” que se vive Semana Santa, que escoge el exjugador de balonmano.

Como buen deportista que es destaca la variada oferta que tiene Valladolid en este aspecto, que cuenta con muchos espacios deportivos y con una representación al más alto nivel en prácticamente todas las especialidades. Sin embargo, para González el deporte debe de tener un carácter popular.

“Valladolid ha recuperado el margen del río Pisuerga en pleno centro de Valladolid para que todo el mundo pueda practicar deporte”.


Se refiere a la zona de la playa, que cuenta además con canchas de baloncesto, fútbol etc. y demás espacio “que nos permiten practicar una gran variedad de deportes o simplemente pasear”.

No olvida sus raíces, toda su carrera deportiva en el Balonmano de Valladolid y en su predecedor, el ACD Michelín, tantos y tantos partidos en el pabellón Huerta del Rey, como él mismo dice “un complejo deportivo que ha resistido al paso del tiempo”. Pero recuerda que es un polideportivo que cuenta con piscinas, canchas de tenis, pádel... “y cumple perfectamente una labor social dando una gran cobertura popular”.

Por ello, no duda en recomendar asistir a ver un partido de su ex equipo, pero especialmente algún encuentro de Champions.

“Ver al Balonmano Valladolid arropado por sus fieles seguidores es un espectáculo que no nos debemos perder".
Pero además añade que si coincide que podamos ver un partido de Champions League, "la satisfacción será completa”, concluye.