El Fundación Grupo Norte viaja para medirse al Barcelona

El actual F.C. Barcelona no se parece en nada a lo que fue este equipo las temporadas pasadas. El anterior fue uno de los conjuntos más complicados a la hora de vencer, sobre todo, cuando jugaba en casa y en su anterior pista, el Instituto Gutmann. Cuajado de grandes jugadores, en los inicios de la presente temporada, diversos problemas internos hicieron que se produjese una ‘desbandada’, incluido el entrenador Óscar Trigo, que también abandonó la anterior estructura deportiva por problemas aún no aclarados.

Al poco tiempo de comenzar la Liga, un equipo que militaba en la Primera División, el Unes Sant Feliu, anunciaba que se hacía propietario de la marca ‘F.C. Barcelona’ y que, por lo tanto, ocuparía la plaza del anterior Barça. Pero en  cuanto al juego, el actual conjunto azulgrana se parece muy poco al juego del equipo al comienzo del campeonato. Sólo lleva dos victorias en su casillero, aunque ahora su juego se ha estabilizado y empieza a realizar buenos partidos. De la mano de sus mejores hombres, el colombiano Carrillo y los extranjeros Schöder y Doody, el Barcelona ha caído de forma clara prácticamente con todos los equipos con los que ha jugado, pero, muchas veces, ha dejado un gran sabor de boca por el juego desplegado.

En cuanto a la actualidad del Fundación Grupo Norte, la semana de entrenamientos se ha desarrollado con normalidad. El único problema es para el inglés Highcock, que tiene un fuerte golpe en uno de sus dedos de la mano izquierda debido al partido del fin de semana pasado contra el Once Andalucía, pero que no debería tener problemas a la hora de jugar.

Además, dos miembros del club que no participarán en el choque será el internacional sueco, Persson, que se encuentra en una concentración oficial con su selección nacional y que volverá a Valladolid el próximo martes, directo para entrenar, y el segundo entrenador David Fernández, que no podrá asistir desde el banquillo a José A. de Castro porque debe presentarse a un examen de carácter laboral. En un primer momento, se optó por esperar al técnico vallisoletano, pero problemas de tiempo a la hora de llegar a Barcelona hizo que se desistiese de tal planteamiento.